Employer Branding. Magnetismo empresarial para El Talento
Se trata de un concepto un poco extraño y poco conocido para los que no desarrollan su actividad profesional en el mundo de los Recursos Humanos. Se trata de un anglicismo que se acuña en los años 60 en Estados Unidos, y que a partir de los 80 llega a España. En sus inicios era algo que sólo preocupaba a las grandes empresas, pero a partir del año 2000 se populariza y cada vez estamos más habituados a oÍrlo. Pero yo me pregunto ¿sabemos lo que realmente significa?, es más ¿qué puede aportar a nuestra empresa?, y por otro lado ¿es útil?
El Employer Branding no es otra cosa que la marca de una empresa como empleador. En otras palabras, la imagen que tiene una compañía no sólo hacia sus clientes sino también hacia sus propios empleados y sobre todo, la imagen que perciben sus posibles candidatos.
¿Qué aporta el Employer Branding a la organización?
El Employer Brand es la marca del empleador, es la reputación de una organización, lo que dicen y cuentan de nosotros. Por lo tanto el Employer Branding, sería el conjunto de las estrategias que ponemos en práctica en nuestra empresa para crear esa marca, y hacerla atractiva para captar talentos, y no sólo talento laboral, también clientes potenciales que desean colaborar con nosotros por lo que somos y representamos. En definitiva tratamos de conseguir nuestra marca transmita confiaza y valor, y por lo tanto influencia. Por lo tanto el máximo objetivo del employer branding es construir una reputación de buen empleador tanto para los empleados actuales como para los futuros.
El concepto de Employer Brand se debe encontrar en los primeros escalones de los planes estratégicos de una empresa seria. Nuestra imagen es lo que nos hace estar vivos, ser competitivos y por supuesto nos da la posibilidad de crecer.
La idea es asociar marca y atributos de identidad corporativa con las características que buscan empleados y candidatos a un puesto de una organización: desarrollo, crecimiento personal, éxito, fuerza, buen ambiente laboral, buena reputación social, etc., con el objetivo final de atraer y mantener el talento en nuestra organización. En este caso, para el Employer Branding, las políticas de Recursos Humanos y la cultura organizacionel cumplen un roles vitales.
La cultura organizacional es otro de los pilares fundamentales además de la política de recursos humanos para conseguir nuestro fin, una marca de empleador atractiva. Tiene que ver con construir un ambiente laboral ameno donde se involucre en la toma de decisiones a los colaboradores, y gestionar el trabajo más por objetivos cumplidos que por cumplir un horario a rajatabla. La verticalidad, la figura de directores y gerentes que amedrentan al resto ya está pasando a la historia a cambio se fomenta el trabajo en equipo, las estructuras son cada vez más horizontales, menos jerarquías y se aprovechan las nuevas tecnologías para dar más independencia. El empowerment es vital como parte de la cultura organizacional, donde cada uno es un poco dueño de su trabajo. A veces nos encontramos con grandes corporaciones que invierten grandes sumas de dinero en promocionar su marca, y sin embargo poseen altas tasas de rotación entre sus empleados.
Las relaciones externas y la RSC, forman parte de nuestra marca, en ellas hay que invertir, pues es la imagen que daremos al exterior, esto es, participación en premios, en fundaciones, universidades, etc.
En todo este proceso es fundamental conseguir con el trabajador y los posibles candidatos, fidelidad, no se trata de un contrato legal, va mas allá, se trata de un contrato psicológico y afectivo de compromiso de éste con la organización.