Everything Everywhere All At Once Oscars 2023.

Everything Everywhere All At Once Oscars 2023.

Everything Everywhere All At Once, es mi favorita, expone la historia de Evelyn Wang, una inmigrante china menopáusica que no está viviendo la mejor etapa de su vida, en la cual su mayor preocupación momentánea es el posible embargo de su lavandería a causa de las deudas tributarias que arrastra desde hace un buen tiempo. Su candoroso esposo Waymond (Ke Huy Quan) al parecer no le está haciendo la vida más fácil, y su hija (Stephanie Hsu) empieza a estar cada vez más distante de ella y su familia en general. Para variar, tiene a un padre ya anciano, del cual está insegura si este la ha perdonado o no por haber abandonado su tierra natal durante su juventud.


Dentro de este embrollo, es durante una auditoría en el IRS dónde Evelyn se encuentra cara a cara ante un dilema multiversal. Una versión alternativa de su esposo Waymond le revela que cientos de Evelyns de otros universos paralelos han sido asesinadas por la villana Jobu Tupaki, por lo que este le enseña a esta versión menos aventajada de Evelyn, realizando saltos multiversales en los que pueda tomar prestadas las habilidades de sus versiones más expertas para poder combatirla, al mismo tiempo que Evelyn puede dar un vistazo de cómo hubiera sido su(s) vida(s) de haber tomado tal o cual decisión en el pasado, esto último siendo el motor principal de toda su temática hasta el cierre.


Es muy inusual el mezclar tantos géneros en tan poco tiempo, de la misma forma que mezcla sus universos propuestos, y más raro aún hacer que ello funcione, ya que abraza lo abiertamente bizarro de forma despreocupada, lo cual hace que también su humor no sea no obstante para todos los gustos. Va desde una ciencia ficción algo irracional (mejor dicho, no se la toma tan en serio), pasando por segmentos de acción/artes marciales bastante cómicos, hasta momentos fotográficos de una vida diaria reflexiva repleta de trauma generacional, y adicional a ello una muy fuerte carga emotiva circunscrita al drama romántico, bastante pegado estéticamente a lo que hizo王家衛[Wong Kar-wai] en su obra maestra花樣年華[In the Mood for Love]. Sus directores lograron sincronizar cada trecho de conflicto familiar y alinearlos a los tramos de acción de manera coreográfica. Luego se recuerda que a pesar de todo ese caos descrito, descansa una historia muy simple; la relación fracturada de una mujer con su familia y su esfuerzo en tratar de corregir las cosas.


Sin embargo, el objetivo auxiliar es transportar la conciencia del espectador y moverla desordenadamente desde risas hasta lágrimas Distribuye sus distintas reacciones en cada nuevo universo, saltando precipitadamente y sin descanso, por ello, en mucho de sus artilugios visuales se esmera en eliminar los cortes de manera definitiva, prescinde de estos para no reemplazar de forma terminal una realidad alterna sobre otra, sino que las deslizan y juegan furiosamente con todas ellas. El mérito de que estos giros dramáticos superpuestos hayan encajado tan bien, se debe a los actores que protagonizan con tanta naturalidad y conexión con la familia nuclear de Evelyn. Ya que a medida que se avanza, cada uno toma el rol de un personaje principal, para luego regresar a ser el secundario, se toma el carácter transicional del cine y lo sobrepasado, quizás consiguiendo ser referencia en su propio estilo o quizás para otros futuros. Encuentra mucho significado no solo en el contraste persistente que se ve, sino en el conflicto y sus cruces temporales, más que imaginarios a veces.


Esta sobrecarga sensorial nunca se detiene y hace que se cae en un escenario tan o más absurdo que el anterior, lo que desata un panorama denso, complejo en sus intentos, y deliberadamente agobiante, tan agobiante que cualquier cosa que parece "mala" en cierta instancia, termina siendo "buena" en la otra realidad. Este sobre exceso imaginativo que genera desconcierto al inicio, se siente luego más que necesario, ya que se enlaza en el mundo real del personaje (Evelyn) con su verdadero propósito, que quizás ya se nos anunciaba desde un comienzo.


La película se sitúa justo en un tiempo en el que recibimos constantemente cantidades enormes de información en tan poco tiempo, y visualizamos sus universos alternos, creo yo, de la misma manera que interpretamos todo este contenido y tratamos de procesarlo en nuestros pensamientos, intentando tomar diferentes formas, diferentes personalidades o diferentes destrezas.


Es un ejercicio frecuente imaginarnos otros escenarios que podrían haber ocurrido en nuestras vidas, visualizamos caminos no tomados y nos sentimos desengañados o arrepentidos por nuestras "malas" decisiones. Esa monumental fascinación de los saltos de un universo a otro que aquí se nos muestra, no radica en aprender Judo y Wrestling en tres segundos, si no más bien sirven para que podamos construir algo de empatía por nuestras versiones que son aparentemente diferentes de uno, y quizás a través de ello, finalmente empatizar con nosotros mismos, perdonándonos errores o fracasos que supuestamente nos han llevado a experimentar una vida insatisfactoria.


La existencia como experiencia es, a veces, aterradora, y aún lo es más contemplando la vastedad del universo y lo trivial de nuestro lugar en él. Cuál es el significado de algo, y ¿por qué debería de tenerlo?, el absurdo de la vida hace que uno llegue a obsesionarse tanto con ella tratando de esquivar la inevitabilidad de la muerte, cuándo al final nada de eso resulta importante, y aun así, esa es la razón por la cual importa tanto, porque nosotros necesitamos que importe, haciéndonos seres absurdos y llenos de significado a la vez.


Everything Everywhere All At Once conduce al espectador a un recorrido emocional sobre todos esos argumentos destacados, urgiéndonos a que demos una vista profunda dentro de nosotros, sobre nuestras expectativas contra la realidad.

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