Liderazgo Empresarial

Hoy vamos a hablar del Liderazgo Empresarial

Nos referimos a la cualidad de una persona al mando de una compañía y que le permite influir en el comportamiento, así como en la toma de decisiones de los demás.

La gestión empresarial requiere de mucho más que lo tradicional; planear, organizar, dirigir y controlar. Requiere asimismo de talento de quienes están a cargo de personas, así como también, de los procesos de negocio. En este sentido, el liderazgo empresarial incluye un conjunto de habilidades que pueden desarrollarse continuamente y se agrupan en habilidades personales, técnicas y sociales.

Habilidades personales: Entre las que destaca el control y equilibrio de las emociones, o “inteligencia emocional”, lo cual resulta difícil dado lo competitivo del mercado y las presiones de los interesados en el negocio. Y es justo ahí, donde muchas personas se debilitan y olvidan lo importante de las buenas relaciones. Ya que llega un momento donde lo único que importa es “alcanzar la meta”, al costo que sea y olvidando los valores propios y en ocasiones, la ética empresarial. Mantener el equilibrio emocional cuando se está al frente de una organización es tan importante como los conocimientos duros acerca del negocio. El “actuar de buena fé” debe ser una práctica empresarial compartida, ya que así, las acciones no sólo se sustentan en la información que se tiene en el momento de tomar una decisión, sino también, en valores.

Habilidades sociales:  La capacidad de tener excelentes relaciones con las personas en todos los niveles de la organización;  la formación de redes de contacto y el vínculo permanente con personas o grupos de interés para el negocio. Se traduce en acciones que van desde; saludar a quien abre la puerta, hacer el esfuerzo por saber el nombre de quienes trabajan en la organización, preguntar cómo están, cómo se sienten y si les hace falta algo en lo que se les pueda ayudar. Acciones muy sencillas, pero que generan buenas relaciones, un clima laboral agradable y obviamente, buenos resultados empresariales. Esta calidad humana en las relaciones de negocios, hará que un directivo sobresalga y se diferencie de los que sólo buscan “cerrar el negocio”. Así, además de mostrar talento para generar beneficio monetario, mantiene una relación incondicional con sus contrapartes, sea para efectos de negocio, o no.

Habilidades técnicas: Se puede ser inteligente emocionalmente, capaz para crear nuevas redes de trabajo, pero sin un sustento técnico adecuado, el negocio no prosperará. Un líder empresarial debe tener pilares sólidos, conocer su industria, y además, una muy buena formación en finanzas, procesos, marketing, ventas y conocimiento de la cuestión legal que rige su negocio. Paralelamente, un buen líder empresarial jamás se estanca en conocimientos, busca ir a la vanguardia de las tendencias y habilidades que se requieren. Va a cursos, diplomados, posgrados y maestrías que le provean de los últimos conocimientos en marketing, negocios, proyectos, planificación, análisis financiero, estrategia, o la disciplina que el mercado esté demandando.

Ventajas y aspectos a cuidar del liderazgo empresarial

Ventajas: Permite aumentar la productividad y eficiencia de los miembros del grupo, ya que favorece la motivación y el espíritu de equipo al conocer de primera mano la situación en la que se encuentra cada uno de los integrantes y transmite confianza a su gente debido a sus aptitudes, logrando mayor compromiso y actividad de las personas que integran la organización con lo que puede llevarla al éxito si sus decisiones son correctas. Esto se debe a que cuenta con el apoyo del grupo de personas que la forman.

Aspectos a Cuidar: Se pueden generar conflictos debido a la confrontación de ideas entre líderes y seguidores. Un liderazgo incorrecto puede propicia malos resultados en el desempeño de las tareas. Puede llegar a desestabilizar a los equipos a causa de una falta de aceptación por parte de los integrantes de los mismos.

Importancia del liderazgo empresarial

El liderazgo empresarial en una empresa es fundamental para poder lograr las metas establecidas, ya que no sólo se requieren procesos eficientes y lo más productivos posibles, también se precisa una figura respetada y valorada por los empleados. Un líder empresarial debe analizar los perfiles psicográficos de su gente para identificar sus necesidades y cubrirlas. Así, logrará llegar a puntos de acuerdo entre empleados de diferentes departamentos y optimizar el funcionamiento de la empresa.

El perfil de un buen líder

En resumen, un buen líder empresarial es alguien con sólida formación teórica, capaz de argumentar sus decisiones por haber desarrollado una visión integral del negocio y la industria. Tiene talento para entrar en nuevos círculos y sumarlos a sus redes de contacto, generando lazos y relaciones de confianza. Por último, es una persona equilibrada en sus emociones, capaz de separar sus estados emocionales, de las decisiones empresariales, ya que un paso en falso podría poner en riesgo a la organización, o dejar una mala reputación entre sus colaboradores internos.

Fomentar liderazgos de este tipo requiere de autodiagnóstico, autocrítica y desarrollar las habilidades carentes, para finalmente ponerlas en acción y mejorarlas constantemente.