Los últimos dos meses del año y la innovación
El mito popular dice que los últimos dos meses del año los dedicamos a reflexionar sobre lo qué pasó en el año y nos aprestamos para iniciar un nuevo año con objetivos claros de una estrategia muy definida.
Por supuesto que para algunas empresas este mito puede parecerse mucho a la realidad pero para muchas otras los últimos dos meses del año están enfocados en:
- Tratar de cumplir la mayor cantidad de objetivos posibles.
- Terminar de cerrar el presupuesto del próximo año
- Cerrar proyectos críticos que ya deberían estar cerrados.
- Y por supuesto, lidiar con toda la locura administrativa, comercial y operativa que implica el fin de un año
¿Y esto qué tiene que ver con la innovación?
Salvo raras ocasiones, el vehículo para innovar es el proyecto. Es decir, hay proyectos que tienen como resultado un producto o un servicio innovador.
A fin de año tendemos a dedicar poco tiempo a los proyectos de innovación y más a los que tienen mayor impacto en el corto plazo.
Esto conlleva a que muchos proyectos de innovación quedan suspendidos o avanzando a “media máquina” hasta febrero o marzo perdiendo tal vez cinco meses de trabajo intenso. Es mucho tiempo para el mundo competitivo que vivimos.
También sucede que a fin de año solemos tener presupuesto disponible que podríamos utilizar para acelerar esos proyectos pero como no los tenemos “arriba de la mesa” no consideramos esa posibilidad de asignación, perdiendo así la posibilidad de acelerar la innovación.
¿Qué podemos hacer en estos dos meses?
Personalmente aplicó la siguiente técnica:
Durante noviembre reviso todos los proyectos abiertos y sus necesidades de presupuesto para entender si es necesario acelerarlos o avanzan en tiempo y forma.
En el caso de los que debería acelerar, analizo si agregando presupuesto los puedo acelerar o no.
Si el presupuesto hace la diferencia, evalúo cuánto presupuesto tengo disponible y decido que proyectos acelerar y en qué medida.
En diciembre me dedico a monitorear solo dos horas por semana el avance de esos proyectos acelerados para asegurar que esa partida del presupuesto esté dando sus resultados.
También dedico otras dos horas semanales a revisar la aplicación del presupuesto del siguiente año en los proyectos que estarán abiertos el próximo año (en curso y nuevos).
Para esto me apoyo en presupuestos de los distintos proveedores o posibles proveedores del proyecto y a las estimaciones de mi equipo.
Esto es importante hacerlo en Diciembre por dos motivos:
- Puedo detectar que es posible avanzar en proyectos antes de que empiece el próximo año y así aprovechar presupuestos no utilizados para avanzar.
- Me permite bajar a tierra las estimaciones que hice meses antes cuando comencé a trabajar en el presupuesto y sólo tenía una visión parcial de los proyectos y sus costos.
Como verán son solo 4 horas por semana en estos dos meses que permiten:
- Acelerar los proyectos de innovación.
- Optimizar el uso del presupuesto disponible para el año en curso.
- Adelantar trabajos de proyectos del próximo año.
Te recomiendo leer: Errores en la innovación que se cometen a fin de año
Director Académico de Educación Ejecutiva | Mentor de Negocios | Profesor Universitario
5 añosMuy buenas prácticas! Gracias por compartir