Los ‘duros antiguos’ del pirata Benito Soto
Reales de a 8 del siglo XVIII encontrados en Cádiz el 3 de junio de 1904.

Los ‘duros antiguos’ del pirata Benito Soto

La pesca de almadraba del atún rojo es tan antigua como la trimilenaria ciudad de Cádiz. Es un trabajo laborioso y duro que se inicia con el despliegue de las redes y termina con el ronqueo y la preparación de las piezas de atún. Los desperdicios que surgen finalizado todo el proceso no son pocos, y era habitual por aquella época que estos se enterrasen en las playas. En eso estaba el joven apodado ‘Malos pelos’ aquella luminosa y tranquila mañana cuando, de repente, su pala chocó con un puñado de monedas de plata.

9 de marzo de 1828. Un fuerte temporal hace que el bergantín de siete cañones ‘El defensor de Pedro’ encalle en la playa de Santa María, en Cádiz, tras confundir su tripulación el faro de la isla de León con el de Tarifa. Su capitán, el temido pirata Benito Soto comprende al instante que el barco está perdido. Ordena a sus hombres que, amparados por la oscuridad de la noche y el mal tiempo, descarguen el botín que llevan y lo escondan bajo tierra para recuperarlo en cuanto sea posible. No hay tiempo que perder, alguien puede verlos.

Como era de esperar, desde una venta cercana, el ‘Ventorrillo del Chato’, ojos curiosos ven que un barco está embarrancado en la arena y dan aviso a las autoridades. Los piratas se dispersan tras acabar el trabajo. Intentan pasar desapercibidos, pero poco a poco todos son detenidos en las calles de Cádiz y poblaciones cercanas. El que llegó más lejos fue su capitán, que fue descubierto, detenido y ejecutado en Gibraltar bajo la acusación de cometer 75 asesinatos y saquear diez barcos.

Olvidado por todos, el tesoro permaneció oculto hasta que la mañana del 3 de junio de 1904 ‘Malos pelos’ lo descubrió mientras cavaba para enterrar restos de atunes. La gente se volvió loca y se echó a la playa con palas y picos. Se hallaron al menos millar y medio de piezas. En los carnavales del año siguiente, el ‘Tío de la Tiza’ convirtió en inmortal este descubrimiento con su tanguillo: “Aquellos duros antiguos / que tanto en Cádiz dieron que hablar / que se encontraba la gente / en la orillita del mar…”.

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Otros usuarios han visto

Ver temas