Los "otros" costes del absentismo laboral

Cuando se discute el absentismo laboral y sus consecuencias, comúnmente nos centramos en su impacto directo: la salud del trabajador y la productividad/competitividad de la empresa. Sin embargo, hay otros efectos secundarios significativos que merecen atención.

Estructura Empresarial en España

La predominancia de microempresas y pymes en España subraya la relevancia del absentismo, que puede ser especialmente perjudicial en estos entornos con recursos más limitados. Aclarar esta realidad ayuda a contextualizar los desafíos únicos para estas empresas y para los colaboradores.

El formato más frecuente en las empresas españolas es el de microempresa (el 38,40 % del total) o pyme (pequeña o mediana empresa, que suman cerca de 3 millones de sociedades, el 61,42 % del total). Por ello situarse en el marco mental de que es un tema de la gran empresa, con muchos más recursos y capacidades para aguantar el impacto que supone, es hacerse trampas al solitario.

Impacto sobre los compañeros

El absentismo no solo carga a las empresas con costes directos, sino que también impone una carga sobre el resto de los compañeros de trabajo. Estos deben asumir tareas adicionales, lo que puede llevar a errores, estrés y un ambiente laboral tenso. Este aumento de responsabilidades puede provocar una cascada de efectos negativos, incluyendo reducción del compromiso, que impactan tanto a los colaboradores como a la propia empresa.

Impacto en la deuda de la Seguridad Social

Los costes para la Seguridad Social aumentan a un ritmo acelerado, generando un aumento fuerte en el volumen de deuda pública necesaria para poder sostenerlo. También hay que recordar que las cotizaciones de la Seguridad Social con las que se pagan las prestaciones, provienen en su mayor parte de las cotizaciones empresariales.

Impacto sobre los Sistemas Públicos de Salud

Mayor absentismo laboral, especialmente en contingencias comunes, precisa de mayor atención sanitaria pública y mayor número de procesos administrativos sobre esa atención sanitaria. Mayor incidencia de absentismo produce un efecto vicioso sobre los Sistemas Públicos de Salud, haciendo mayor uso de los Sistemas Públicos de Salud (más consultas en primaria y en urgencias, más pruebas diagnósticas, más consultas en especializada...). En un entorno de servicios sanitarios con listas de espera altas, consecuencia de un envejecimiento de la población, un mayor incidencia desde la pandemia y una carencia sistémica de profesionales sanitarios, el aumento del absentismo no ayuda en nada.

Obviamente todas las medidas que reduzcan absentismo laboral, contribuirán en la descongestión en el uso de esos sistemas.

En definitiva, el fenómeno del absentismo laboral por incapacidad temporal genera efectos mucho más allá de los obvios.

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