Médicos cubanos. México validando un doble abuso.
Comenzamos el cuarto mes de la pandemia, con la peor crisis de salud en la historia de México. En ese lapso han muerto más de 260 médicos y profesionales de salud, de entre más de casi 26,000 infectados.
A este punto ya es clara la responsabilidad de las autoridades de Salud (en su mayoría del IMSS) quienes no solo no han dotado del equipo de protección personal (EPP) adecuado, sino que han mostrado una gran ausencia de liderazgo y empatía hacia los profesionales afectados y sus familias. Los médicos mexicanos que laboran en las instituciones de salud se encuentran, además, mal pagados. El salario promedio de un especialista en México es de $30,000 pesos mensuales ($1,350 dólares) y, aunque se ha anunciado un sobresueldo del 30% adicional para quienes laboran en áreas de contagio de covid, esta cantidad no compensa el riesgo. 1 de cada 10 profesionales de salud muertos por covid en el mundo, es mexicano.
México necesita en este momento más médicos y especialistas para atender las diferentes áreas de un sistema de salud que ya se encontraba, de por sí, en crisis antes de la pandemia. Sin embargo, las convocatorias para contratación no han logrado causar un gran efecto en el reclutamiento, básicamente por el bajo ingreso que ofrecen comparado con el riesgo. México necesita invertir más en sus médicos.
En este contexto, el gobierno mexicano, a través de un INSABI al que le hacen falta recursos, decidió desde finales del mes de abril, “contratar” a Cuba los servicios de 585 médicos, pagando por ello $6.2 millones de dólares; algo así como $140 millones de pesos. Lo que comenzó siendo un rumor, se confirmó oficialmente la semana pasada a través de la Dra. Oliva López, Secretaria de Salud de Ciudad de México. Ante estos hechos, el día de ayer, dirigentes de 11 colegios y asociaciones médicas publicaron una enérgica protesta ante un hecho absurdo y sin fundamento.
"De manera injusta se nos ha relegado, privilegiando a médicos extranjeros, desconociendo la capacidad académica de nuestras Universidades…”
La covid: El mejor pretexto ante una decisión ideológica.
La llegada de los médicos cubanos no fue sorpresiva; de hecho, era de esperarse. La pandemia de SARS CoV2 solamente le dio a las autoridades el mejor pretexto para detonarlo.
La responsabilidad directa de la planeación y decisión proviene de la Dra. Asa Cristina Laurell, hasta la semana pasada Subsecretaria de Integración y Desarrollo del Sector Salud y quien aparentemente está dejando su cargo por razones que trataremos en otro artículo.
Desde el inicio de esta administración, Laurell había concebido un servicio nacional de salud único y gratuito; sin embargo, el primer obstáculo al que se enfrentó y reconoció, fue la enorme complicación que representaría el fusionar las diferentes instituciones existentes y la gran idea se vio reducida a -solamente- desmantelar el Seguro Popular y crear el malogrado INSABI. Para Laurell, aunque sueca de nacimiento, el modelo de salud ideal no era el nórdico, europeo o de “Estado de bienestar”. Ideóloga y estudiosa de la “Medicina Social”, su modelo de salud esperado es 100% nacionalizado: el modelo cubano o venezolano en el que los médicos son formados por el Estado y para servir al Estado. Es en ese contexto en el que se planeó la llegada de médicos y “asesores” desde Cuba, los cuales ayudarían a consolidar el nuevo sistema de salud en México, iniciando -aunque fuera- con el incipiente INSABI. Fue entonces cuando llegó el SARS CoV-2.
El presidente López Obrador no ha tenido ningún pudor en decir que esta pandemia le va “como anillo al dedo” a su propuesta de gobierno y el pasado 24 de abril se publica en el Diario Oficial un decreto en el cual “se establecen las facultades para contratar personal profesional de la salud con formación en el extranjero, exclusivamente por el tiempo que dure la emergencia sanitaria generada por el virus SARS-CoV-2”. Lo que esto significa, en claro español, es que los médicos entrenados en el extranjero (en este caso, Cuba) podrán ejercer en México sin cédula profesional ni acreditación de conocimientos de algún tipo.
El terreno estaba preparado; a los pocos días comenzaron a llegar discretamente, los contingentes desde la isla, bajo la protección de la Dra. López, alumna y colaboradora cercana de la Dra. Laurell, ideóloga como ella de la “Medicina Social” y enemiga de la “medicina neoliberal” y el Seguro Popular.
Una historia de esclavitud en el siglo XXI
Desde hace varias décadas, Cuba desarrolló un sistema de intervención internacional a través de enormes cantidades de médicos que hace llegar a zonas con algún tipo de conflicto humanitario o de salud.
Diseñado en un inicio como una efectiva táctica de relaciones públicas y buena voluntad del gobierno de Castro, Cuba vio rápidamente la oportunidad de capitalizar dos recursos fáciles: Un gran número de médicos producidos bajo el sistema educativo socialista de la isla y la necesidad de cumplir con los requisitos del régimen que controla, tanto su desarrollo profesional, como la economía de sus familias.
Es así como Cuba ha promovido la renta de los servicios de estos médicos, recibiendo a cambio de del trabajo de ellos:
1.- Recursos monetarios directos, en dólares y pagados de forma no clara al gobierno de La Habana. De los “honorarios” correspondientes a cada médico, Cuba retiene el 90%. Los cubanos que se encuentran en este momento en México recibirán en neto apenas $1,000 dólares por toda su misión. Si permanecen 4 meses, sus familias habrán recibido $5,500 pesos mexicanos mensuales. El gobierno cubano se embolsará con ellos, más de $5.8 millones de dólares.
2.- La oportunidad de intervenir, en su calidad de “asesores”, en las políticas de salud, desarrollo social básico y por supuesto, transmitir los mensajes ideológicos de la Revolución castrista, formando bases y enclaves políticos que les aseguran, por lo menos, un flujo de recursos monetarios, si no es que la oportunidad de expansión e intervención interna (como en el caso de Venezuela).
(Foto: Bloomberg)
Algo que debemos entender es que, en la mayoría de los casos, los médicos itinerantes no son responsables de esta conducta sino víctimas. La educación que han recibido tiene un precio y ellos están en deuda con la Revolución, al igual que sus familias quienes permanecen en la isla como rehenes del sistema. Sus pasaportes son retenidos, sus movimientos administrados y su agenda supervisada. Si hablan de más, opinan, desobedecen o desertan, sus familias la pasarán mal. No tienen otra salida que viajar con el equipo, hacer lo que puedan o sepan hacer y regresar con cierto prestigio a Cuba habiendo ganado para ellos $125 o $250 dólares mensuales.
La medicina cubana, una construcción de mitos.
Hasta este momento de desconoce cual es la labor o función de los médicos cubanos traídos por el gobierno, aunque se sabe que están asignados a los hospitales del gobierno de la Ciudad de México y algunos semi-covid manejados por el INSABI.
A decir de la Dra. López, “tienen mucha experiencia en territorio, en la parte epidemiológica comunitaria, en el refuerzo de las actividades hospitalarias, y también en asesoría, capacitación, y apoyo en diversos componentes de la estrategia…”, lo que quiera que eso signifique. Aunque asisten a esas unidades, lo cierto es que no hay evidencia de que estén revisando, diagnosticando o tratando pacientes y no son pocos los comentarios donde se dice que se alejan de las zonas covid. Aparentemente no han venido a hacerlo. Es muy probable que no sepan qué hacer.
Desde el triunfo de la Revolución, Cuba luchó por establecer un estándar de calidad mínima sanitaria. Así, para los años 70s sus indicadores de mortalidad infantil eran bastante aceptables y las cifras de morbi-mortalidad general, así como su expectativa de vida se comparaban a las mejores de mundo. Sin embargo, los pasados 30 años todo ha venido abajo. El nivel general de vida de la oblación es paupérrimo y su acceso a satisfactores nutricionales y de salud es escaso.
La salud en Cuba funciona con el mínimo indispensable. Más allá de las cifras oficiales y la maquinaria de propaganda, las condiciones generales de mantenimiento y actualización de sus hospitales son malas y su acceso a nuevas tecnologías muy limitado. En este ambiente, hoy en día son solo unos pocos médicos de élite quienes tienen acceso a un entrenamiento de especialidad, así como son pocos los pacientes en la isla que se benefician de ello.
(Foto: Cuba Si)
Debido a su escaso acceso a tecnologías y recursos, la investigación en Cuba se ha vuelto limitada y en varias ocasiones basada en reciclaje de ideas y en algunos casos pseudociencia. Recientemente, Cuba quiso sorprender al mundo al mencionar que un “interferón cubano” se utilizaría para tratar exitosamente la covid-19. La noticia fue publicada en Granma, el periódico oficial del gobierno cubano y no en alguna revista científica arbitrada o revisada por pares. La realidad es que este interferón alfa 2-b, es solo de fabricación cubana, pero su tecnología es suiza y es fabricado por varies empresas en el mundo. Aunque se ha usado con resultados positivos en le tratamiento de la primera forma de SARS y del MERS en combinación con rivabirina, no hay resultados demostrables en el tratamiento de covid-19.
El “interferón cubano” fue solamente propaganda.
México está pasando por una fase de crecimiento en contagios y muertes en la peor pandemia de la historia moderna. La salud en México ya estaba en crisis antes de la llegada de la covid-19. En este contexto, no se entiende como es que México despide médicos y profesionales de la salud, al tiempo que contrata otros con bajos salarios, pero paga cifras millonarias a un gobierno extranjero, por médicos que vienen a no hacer nada.
La molestia de las asociaciones y colegios médicos es más que justificada. Los médicos en México han sido atacados e insultados en el pasado y ahora se trae a médicos de Cuba, con condiciones de albergue y alimentación pagadas, en un esquema de tráfico de personas convalidado por las autoridades de salud.
Los médicos en México merecen más.
Psicóloga Clínica experta en Desarrollo Humano con enfoque de género#wellness
4 añosAdicional los médicos dicen que vienen a asesorar no a atender pacientes. Pero también recuerd n que sus sueldos no los van a recibir ellos se van directo al gobierno de Cuba para solo dar lo proporcional a la comunidad médica de allá... Ay les dejo esta información
--
4 añosNo se trata de discutir si son malos o buenos. Lideres. en sector salud y en comunicación deberían de llevar una discusión más a las causas que obligan a traer médicos porque los mexicanos no cubrimos o porque no vamos a ares rurales. Es una lastima el silencio Por más de 30 años tolerando. El desgaste de sector salud y ahora intensamente preocupados
Jefe de Maquilas, Responsable Sanitario.
4 añosQue mejor asignen el dinero 💵 para más camas para los hospitalizados. En México hay excelentes Médicos, enfermeras, camilleros. En apoyo debe ser desinteresado e incondicional.
Haciendo de lado el hecho de efectivamente en Mexico hay gente muy preparada en el sector salud y no se le ha tratado como es debido...practicamente Mexico alquilo esclavos, los cuales no fue presisamente eleccion propia estar aqui y es obvio porque no se quieren acercar a las zonas de riesgo, si estan de acuerdo con la explotacion de personas...enserio esperan que tomen en cuenta los colegios medicos y mejoren los sueldos de los que prestan sus servicios...?
Director en Administracion y Asesoria en Condominios
4 añosNingun medicos son asesores politicos que trajo el KKS no tiene verguenza.