Misión vuelta al cole: disfrutar de la rutina escolar

El inicio del nuevo curso escolar marca el comienzo de un emocionante capítulo en la vida de los niños y sus familias. La vuelta al cole no solo implica la adquisición de conocimientos académicos, sino que también representa un periodo crucial para establecer un equilibrio en la vida diaria.

En este fascinante viaje, la organización familiar emerge como una poderosa herramienta capaz de marcar la diferencia entre un comienzo exitoso y el más estrepitoso de los caos.

La vuelta a la realidad después de las vacaciones puede ser muy dura. No lo vamos a negar. Volver a coger ritmo no es fácil para nadie, y menos para los peques de la casa. Pero no desesperes. Te traemos unas cuantas estrategias para que todo fluya lo mejor posible.

¡Rutina, bendita rutina!

Cuántas veces habremos implorado la vuelta al cole durante las deseadísimas vacaciones. Disfrutar de la libertad y la diversión es altamente emocionante al principio, pero con el paso del tiempo podemos llegar a echar de menos esa sensación de orden y estabilidad que la rutina nos otorga.

Sin embargo, romper con el barullo asentado en verano y retomar los buenos hábitos puede suponer un reto para muchas familias. Acostarse antes, disminuir el tiempo de ocio, fijar horarios de estudios, asumir otras muchas tareas… es imprescindible para mejorar la productividad y optimizar el rendimiento académico (o empresarial), pero muy poco apetecible. Hacerlo de forma divertida es clave para mantener la motivación y el entusiasmo durante este proceso de adaptación.

Te aseguramos que fomentar un ambiente ameno y estimulante que facilite el aprendizaje y la participación de los estudiantes es posible. Tan solo hay que convertir las rutinas en experiencias agradables, permitiendo que los niños las asocien con emociones positivas y un sentido de diversión, lo que a su vez fortalece su disposición para enfrentar nuevos desafíos con confianza.

Trabajo en equipo para una trepidante misión

La vuelta al cole, ese momento en el que los libros y las mochilas cobran vida nuevamente, representa el inicio de una nueva aventura para los más pequeños de la casa. Sin embargo, este emocionante viaje no es solo responsabilidad de los jóvenes exploradores, sino de toda la unidad familiar.

En lugar de considerar los buenos hábitos como una monótona obligación, ¿por qué no transformarlos en una emocionante expedición en la que cada miembro de la familia sea un valioso integrante del equipo? Os damos la bienvenida a otra forma de ver y hacer las cosas, donde despertarse, desayunar, prepararse y llegar al colegio a tiempo se convierten en valientes fases de una fascinante misión.

El camino a seguir, un mapa con las etapas del día

Desde el instante en que el sol asoma en el horizonte hasta el momento en que los peques caen rendidos al finalizar la jornada, traza un mapa ilustrativo con el que guiar a estos intrépidos exploradores.

Cada paso que den los acercará más a la meta, tal como si estuvieran enfrentando los desafíos de una emocionante expedición en busca del conocimiento y el crecimiento personal. Una excelente manera de conseguir que las rutinas sean más divertidas y entendibles.

¿Cómo llevarlo a cabo? Muy sencillo. Dibuja o imprime imágenes representativas del día a día como el despertar, el desayuno, el colegio, las actividades extracurriculares, el tiempo de juego, la hora del baño, el momento de la cena o el de acostarse. Intenta que los colores sean llamativos y, si es posible, involucra al niño en la creación del mapa. Pregúntale sobre sus actividades favoritas y tenlas en cuenta. Esto será una motivación extra para seguir las rutinas. Y, muy importante, indica la duración de cada una de las actividades para enseñarle a administrar el tiempo.

¿Y si contáramos con superpoderes para los buenos hábitos?

Inspira a los niños a adoptar la identidad de un superhéroe para enfrentar los desafíos diarios de la vuelta al colegio. Cada superhéroe podría tener una habilidad especial relacionada con una tarea específica, como "Speedy el Rápido" para vestirse velozmente o "Super Organiza" para mantener el área de juegos ordenada.

Podéis crear vuestros propios superhéroes, basados en vuestras mayores pericias y fortalezas. Invita a los niños a diseñar sus trajes y capas para dar vida a sus personajes. Como comentábamos, cada superhéroe ha de tener una habilidad que ayude a superar un desafío de la rutina escolar.

¡Fundamental! Estos valientes héroes han de practicar sus destrezas. Así que organiza sesiones de entrenamientos superheroicos para que perfeccionen la técnica. Una competición de vestirse rápido, el lavado de dientes más sublime o dejar el plato de la cena resplandeciente.

Esta dinámica puede combinarse con el mapa de la rutina anterior. En cada etapa podrás identificar al superhéroe responsable de enfrentarse a ese desafío concreto. Les servirá para comprobar sus progresos y sentirse más involucrados en cada paso.

Convida a toda la casa a unirse a la aventura. Los padres también pueden adoptar sus propias identidades de superhéroes y participar en los buenos hábitos del día a día junto a los peques. Puede parecer una tontería, pero fomentará la cohesión familiar y mostrará a los niños la importancia del trabajo en equipo.

El reloj mágico

Durante el periodo de adaptación a la realidad, el tiempo puede parecer apresurado y, a veces, los momentos especiales en familia pueden pasar desapercibidos. Crea un reloj mágico imaginario con el que detener el tiempo y disfrutar de momentos especiales, como desayunar juntos o contar una historia antes de ir a dormir. Los padres y madres también podrán utilizar este instrumento como recordatorio de la importancia de estar presentes y compartir tiempo de calidad con los hijos. En el momento de su activación realiza los movimientos mucho más lentos para llamar la atención y que realmente quede retenido en la memoria.

Al implementar esta actividad, se fomentará la unión familiar y se creará un ambiente de aprecio por el tiempo compartido. Los momentos especiales en familia serán valorados y recordados con cariño, reforzando los lazos familiares y enriqueciendo la experiencia de la vuelta del verano para todos.

Motivación extra para la organización familiar…

Recuerda adaptar las propuestas a las edades, inquietudes y responsabilidades de tus hijos. Una misión espacial, una expedición entre dinosaurios, el rescate de una princesa o un simple planning con las tareas establecidas para fomentar el trabajo en equipo. Todo depende del momento vital en el que se encuentren.

En ocasiones, se pueden instaurar premios y reconocimientos por la consecución de una etapa o una misión. Pegatinas, sellos o puntos para llegar a una recompensa mayor, como una tarde de cine o acudir a un parque especial, pueden ser buenas alternativas para aportar mayor estímulo.

Ahora que estamos planteando nuevas rutinas en la organización familiar es un fantástico momento para motivarse a introducir nuestros propios retos de ahorro. En TARGOBANK ponemos a tu disposición el Depósito Impulso con una rentabilidad hasta 3,00% TAE, 2,960 % TIN (a 24 meses). ¡Infórmate para hacer crecer tus ahorros!