Octubre, el mes de las Empresas Familiares

Su efeméride apunta a reconocer y visibilizar a este tipo de organizaciones a nivel internacional. Por qué las Empresas Familiares son clave en la sociedad.

En Argentina, 3 de cada 4 empresas son Empresas Familiares. Generan el 70% de los puestos de trabajo de la actividad privada y entre 60/70% del PBI del país. Son portadoras de un alto nivel de integridad y de valores, e introducen un grado elevado de responsabilidad social, lo cual contribuye a crear un entorno propicio a la conciliación de la vida familiar y laboral. Además, estas empresas suelen garantizar la transmisión de conocimientos especializados y competencias, y desempeñan, en algunos casos, un importante papel de cohesión social. Sin embargo, aún no reciben el apoyo necesario, el reconocimiento ciudadano o social, y la atención diferenciada en el marco legal, civil y comercial que les favorezca en el desarrollo de su complejo sistema integrado por Familia, Empresa y Propiedad.

Las Empresas Familiares, al igual que cualquier otra organización, buscan crecer y prosperar, pero tienen un objetivo adicional que las hace únicas: trascender más allá de su propia existencia inmediata. “Dejar una huella perdurable en el tiempo para la familia y para la empresa no ocurre de manera automática; requiere de un enfoque consciente y estratégico de la Persona Humana, la Familia, la Organización de Gestión y el Patrimonio”, explica Natalia Christensen , Presidenta del Instituto Argentino y Latinoamericano de la Empresa Familiar (IADEF e ILAEF, respectivamente). “Invertir en capital humano garantiza la perpetuidad de cultura de Empresa Familiar para la creación de valor empresarial y social a través de las generaciones”, agrega.

En este contexto, dada la relevancia que tienen las Empresas Familiares en la sociedad y en la economía de nuestro país, es necesario fortalecer el desarrollo sostenible de estas organizaciones, focalizando en las ventajas competitivas que le atribuyen el trinomio Empresa, Familia y Patrimonio Privado. De allí que IADEF y CAME se han unido para promover acciones encaminadas a sensibilizar, formar e informar sobre la Empresa Familiar. En conjunto realizan cursos virtuales y talleres presenciales, que brindan herramientas específicas para la gestión y dirección de la Empresa Familiar, y crean espacios de networking y conversaciones entre pares de familias empresarias argentinas.

Iniciativas para transformar a la sociedad

El 5 de octubre se celebra el Día Internacional de la Empresa Familiar (DIEF), una iniciativa global que surge desde la necesidad de concientizar a la sociedad en general y a todas las instituciones públicas y privadas, sobre la importancia de este tipo de empresas para el desarrollo socio-económico, político y cultural de cualquier país del mundo. EL DIEF es una propuesta abierta a cuántos ciudadanos, Empresas Familiares y actores sociales quieran sumarse, y su objetivo es sociabilizar y visibilizar el carácter distintivo de las Familias Empresarias en la responsabilidad por un relacionamiento colaborativo y positivo con quienes sostienen la creación de valor, y los valores con los que son tomadas las decisiones de negocios e inversión a largo plazo. “Desde el IADEF y el ILAEF creemos que el reconocimiento público, así como la promoción y difusión que inspiran las Empresas Familiares, es importante para la construcción futura de ciudadanía y de los países”, refuerza Natalia Christensen.

Bajo esta premisa, anualmente, IADEF e ILAEF organizan un Programa de Premios, dirigido a las Empresas Familiares y su ecosistema con el fin de resaltar que el esfuerzo y el trabajo de los hombres y mujeres de familias empresarias, demuestran que es posible ser exitosos y éticos. El 9 de octubre se realizará su XII edición, que convoca con la idea “dejar una huella perdurable en el tiempo”. Así se realza que las personas son las artesanas de la evolución humana, constructoras de la capacidad para influir con impacto positivo y duradero en la familia, economía y sociedad, creando futuro con decisiones del presente. La visión de dejar huella, construir un legado sólido, implica la transferencia de valores, conocimientos y tradiciones de una generación a otra. “Construir un legado no solo garantiza la estabilidad de la empresa y la armonía en la familia, sino que también contribuye a la formación de una identidad y una reputación que perdurarán en el tiempo”, comenta Javier P. Faiwusiewiez , Director del Programa de Premios IADEF & ILAEF 2024. “De este modo, las Empresas Familiares se convierten en vehículos para el desarrollo de una historia compartida y un patrimonio duradero, que define el impacto de su existencia en el futuro.”

Entre las categorías premiadas se reconoce: Empresa Familiar centenaria, sustentabilidad, trayectoria y legado familiar, innovación, profesionalización, liderazgo, nuevas generaciones y responsabilidad social. “Para muchas de estas empresas, el verdadero éxito no se mide únicamente en términos financieros, sino en la capacidad de dejar una huella duradera en la comunidad, en sus equipos, en su industria y en el país”, expresa Javier Faiwusiewiez. Estos premios son testimonio de ello. Y la iniciativa del IADEF y el ILAEF para celebrar cada 5 de octubre, con el objetivo de contagiar a personas e instituciones de todo el mundo a reconocer su importante labor a través de distintas acciones que estén a su alcance. Este año, proponen sumarse al #DIEF en redes sociales con un posteo alusivo a la fecha, durante el mes de octubre. ¡Sigamos construyamos juntos cultura de Empresa Familiar!

Para más información sobre IADEF: www.iadef.org

Y del Día Internacional de la Empresa Familiar: www.diainternacionaldelaempresafamiliar.org