Pasos para elaborar el cuaderno de prácticas del módulo de FCT

El cuaderno de prácticas del modulo de formación en centros de trabajo es un cuaderno donde el alumno/a de formación profesional anota diariamente o semanalmente las tareas realizadas en la empresa durante la realización de dicho módulo.

Es por tanto una herramienta de seguimiento y control de la actividad del alumno en el centro de trabajo. Sin embargo es importante para el alumno q realiza el modulo de FCT que vea el cuaderno de prácticas como algo más que una herramienta de control.

El registro de la actividad por escrito en una empresa nos da la oportunidad de examinar detenidamente diferentes aspectos del trabajo, procedimientos, herramientas y aspectos técnicos. Y sobre todo la posibilidad de conservar unos apuntes sobre lo aprendido que permanecerán en el tiempo facilitando la posibilidad de que podamos consultarlos en el futuro.

Es por ello esencial que al redactar en que consiste la actividad en un puesto de trabajo y detallar los procedimientos lo hagamos de la manera más detallada y clara posible, como si estuviéramos escribiendo para una persona que no sabe nada, que nunca ha realizado esa actividad pero que con solo leer y seguir los pasos pueda desarrollarla.

Y esa persona es nuestro yo del futuro. Y es que una vez se detiene una actividad los conocimientos con el paso de los meses se difuminan y si los apuntes tomados no son claros, están incompletos o son escasos, ante la necesidad de consultarlos es seguro que vamos a tener dificultades.

Pero si hacemos una redacción detallada para una persona que debe realizar la actividad partiendo de 0, podemos estar seguros que el día que necesitemos consultar los apuntes no vamos a tener ninguna dificultad.

En primer lugar es importante tener claro que puesto o puestos de trabajo estamos ocupando y definirlos de forma clara ya que de ese puesto se derivan el cúmulo de tareas y responsabilidades que asume el trabajador.

Si estamos operando una máquina, torno, rectificadora, fresadora, etc... es primordial conocer en profundidad características, especificaciones y detalles técnicos de la máquina desde el principio. Por tanto debemos identificar el fabricante, el modelo y el tipo de control con el que va equipado la máquina.

Podemos interrogar sobre medidas de la máquina, capacidades, o consultar la documentación de la máquina si se nos facilita. En muchos casos dicha documentación que acompaña a la máquina no esta disponible para el operario en cuyo caso solo queda solicitarla y como último recurso acudir a la web del fabricante.

No es de extrañar que algunos trabajadores ignoren características de la máquina que operan como tamaño de los depósitos o dimensiones de la máquina porque consideran que no es importante. Conocer en profundidad el modelo y las características de la máquina que estamos operando es uno de los detalles que marcan la diferencia para un buen profesional.

Saber que estamos fabricando también nos ayuda a entender el proceso de fabricación, cual es el destino último de esa pieza y su función. No siempre es posible identificar la pieza pero el proceso de entender porque estamos haciendo determinadas operaciones de mecanizado en una pieza nos ayuda a una visión mucho más completa de la importancia de nuestro trabajo.

Saber el motivo por el que una pieza va rectificada en una cara o pq tiene un determinada tolerancia superficial o geométrica nos hace más competentes en nuestro trabajo y nos va a facilitar afrontar diferentes dudas o problemas que nos surjan en el proceso de fabricación. No es esencial, podemos fabricar una pieza simplemente siguiendo el plano sin conocer su función última pero no deja de ser una carencia.

Una descripción detallada y clara de todo el proceso de fabricación que realizamos nos va a permitir que si en el futuro queremos replicar la actividad podamos guiarnos paso a paso por los apuntes.

Sin embargo también es importante entender y no solo describir lo que estamos haciendo en cada momento. Si estamos desplazando un origen no solo debemos anotar, sino también entender porque desplazamos ese origen. De esta forma sabremos lo que estamos haciendo siempre, en todos los casos que se nos van a presentar y no simplemente seguir una formula matemática anotada que seguramente no pueda aplicarse a todos los casos de forma correcta.

Debemos incluir también pequeñas recomendaciones de seguridad a la hora de realizar el trabajo u operar la máquina. También como realizamos el trabajo de forma cómoda y sin lesionarnos.

Dividir en capítulos o temas, es un recurso que nos va a permitir que el cuaderno de prácticas no sea repetitivo. Y es que probablemente aprenderemos mucho más unas semanas o días que otros. Por lo que es una práctica correcta, mucho más ordenada y estética, el agrupar conocimientos en temas y después administrarlos en diferentes partes del calendario de las prácticas.

Es muy importante definir conceptos. Si realizamos un equilibrado, si estamos midiendo una rugosidad, no está de más incluir una definición de que es equilibrar o que es la rugosidad acompañado de una explicación, ya que como hemos dicho aunque se presupone que conocemos conceptos básicos estamos escribiendo como si lo hiciéramos para una persona que prácticamente parte de cero.

Por último, incluir todas las herramientas que utilizamos en el desempeño de nuestra actividad y como se utilizan es también importante. No es de extrañar que muchas herramientas básicas se utilicen de forma errónea o con los vicios adquiridos durante años de trabajo pero todas ellas están pensadas para utilizarse de una forma concreta y correcta.

Un buen cuaderno de prácticas nos va permitir adquirir el habito de analizar cual es nuestro trabajo y como podemos mejorar, así como preservar una memoria de todo aquello que realizamos y que nos puede servir de ayuda en nuestro futuro profesional.