REPENSAR LOS NEGOCIOS. LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO, LA ERA DIGITAL Y LA DIVERSIDAD.
En cada conferencia que tengo la oportunidad de disertar, le digo a la audiencia que, no tengo una historia triste para contar, no tengo para contar una historia de niño muy pobre devenido a un estrato socioeconómico superior por innumerables trabajos de todo tipo que acarreaban sufrimientos casi inhumanos. Entre risas y asombro, veo gestos de intriga.
Lo que tengo para contar es un camino recorrido de enorme esfuerzo, de ciento de tropiezos y caídas, de padres con casi nula instrucción formal, de padres con coraje y esfuerzo superior al común del ser humano, de padres que transmitieron con fuerte ahincó el espíritu emprendedor y, fundamentalmente, que inculcaron en ver más allá, ver mucho más allá del momento. Recuerdo que mi padre solía decirme, “cuanto más lejos veas, más lejos vas a llegar”. Pero por sobre todas las cosas había que “buscar en el otro que de bueno tenía para compartir” y ayudarnos mutuamente a crecer. Mi madre nacida y criada en el campo, me decía, “si tenes una pala y el otro tiene un balde roto, tráelo, una ayuda te va a dar”.
Sin una niñez de sacrificio, comencé a trabajar en los negocios de mi padre a los 11 años, han pasado ya más de cuarenta años de labor. Distintas actividades económicas, distintas posiciones labores, desde aprendiz hasta gerente general, distintos escenarios educacionales, diferentes sitios geográficos donde viví y me desarrolle profesional y personalmente.
La pasión por emprende, por conocer, aprender y aprehender fundamentalmente de las “familias empresas” me llevaron a estudiar e investigar como lograban sobrevivir en el tiempo esas empresas, y también, verlas desaparecer en tan solo “instantes”. Hoy, infinitas situaciones y variables hacen que la vorágine sea cada vez más intensa. Cada vez más los desafíos son mayores e implican más adaptación, más conocimiento, más flexibilidad para cambiar, adaptar y re comenzar.
La permanencia inalterable del cambio es la máxima obligación, y al mismo tiempo, la oportunidad que tiene el empresario para “re inventarse y trascender en el tiempo”.
Descubrir nuevos valores, nuevas oportunidades y encontrar el nicho de mercado que no ha sido captado, desarrollarlo, aprovecharlo y, rápidamente estar dispuesto para un nuevo desafío, sabiendo que prontamente la competencia se hará presente, lo que obliga a nuevas acciones creativas para no solo permanecer, sino para lograr el punto de inflexión que lo lleve a un estadio superior.
Hoy el conocimiento es el valor más preciado que tiene el ser humano, hoy el conocimiento es un valor que nos hace transformar la vida cotidiana momento a momento. El conocimiento esta cada vez más al alcance de todos. Lo que nos hace diferentes, lo que nos hará superar barreras, es su aplicación.
La aplicación del conocimiento, es lo que hace a la transformación y desarrollo.
EL avance de la tecnología, producida por la adquisición de conocimiento y su aplicación en pos de cambiar procesos, metodologías, practicas cotidianas, forma de comunicación etc., han producido, y más aún, producirán con una creciente exponencial, cambios sustanciales en las relaciones económicas. Hace tan solo cinco o diez años, a lo sumo, era impensado que sin siquiera salir de nuestras casas, de tan solo una habitación, podríamos adquirir un producto en el otro lado del mundo y en dos semanas tenerlo en la puerta del domicilio. Hoy, es posible, y es posible un sinfín de operaciones comerciales que nos han llevado a estar transitando en esta era de economía digital, quizás aún incipiente, pero hay mucho por llegar, comenzando por la posible desaparición paulatina de la moneda, tal cual la hemos visto y conocido hasta hoy. Tal es el avance de la economía digita, que un pequeño, pero muy avanzado país como Estonia, ha declaro el acceso a internet como un necesidad de primer orden (como el alimento, por ejemplo) por lo cual toda su población accede sin cargo alguno y, ellos mismos con los precursores de la moneda digital.
Cada lanzamiento de innovaciones o novedades, son cada vez más acotada su permanencia en forma exclusiva en el tiempo. Rápidamente, será no solo copiada esa mejora, sino que será superada por la acción de un competidor que haya encontrado una mejor aplicación del conocimiento adquirido. Esa ventaja competitiva, empieza tener mayor valor en acrecentar la diferenciación con mayor conocimiento aplicado y da un sustento superior en, la aceptación e incorporación a las organizaciones de mayor diversidad cultural.
Los avances y cambios sostenidos en esta última década se suceden una y otra vez aceptando, compartiendo y, aprovechando la diferencia. En esa “DIFERENCIA” el potencial enriquecimiento que tiene las empresas en los años venideros.
Las ventas y una gestión eficiente y eficaz, son sumamente necesarias. La aceptación y aprovechamiento de la diferencia, la diversidad cultural, el conocimiento aplicado en la era de economía digital son IMPRESCINDIBLES EN EL ESPIRITU EMPRENDEDOR. “Cuanto más lejos veas, mas lejos llegaras”, “buscar en el otro que de bueno tenía para compartir”, “si tenes una pala y el otro tiene un balde roto, tráelo, una ayuda te va a dar”, claros ejemplos de aceptación de las diferencias para el beneficio mutuo.
La competencia esta atenta y alerta, no importa si no la haces, ellos lo harán con sumo agrado. La re conversión de los negocios es “CHA” desarrollar y capacitar las mejores habilidades y la ACTITUD para confirmar la convicción y perseverancia.
Solo se trata, de repensar los negocios.
Pedro Antonio López
Lic. en Administración
Especialista en Gestión de Empresas Familiares.