Revitalizando educación
José Luis Tapia-Rocha
📊 Consultoría Estratégica en Posicionamiento Público y Liderazgo Ético
La situación educativa en Perú requiere una transformación radical, y la respuesta está en la aplicación de principios liberales clásicos. La gestión estatal de la educación ha demostrado ser ineficiente y, en muchos casos, insostenible. Ante la revelación de que más de 3 mil colegios públicos enfrentan cortes de agua, es evidente que el sistema actual no cumple con las necesidades básicas.
La solución fundamental radica en transferir los derechos de propiedad de los colegios estatales a sus operadores naturales: directores, maestros y personal administrativo. Estos individuos, como nuevos dueños, tendrían un interés directo en el éxito de la institución, a diferencia del Ministerio de Educación, que históricamente ha mostrado ineficacia y desinterés.
Bajo esta nueva estructura, la gestión de cada colegio sería encomendada a un gerente privado, contratado y supervisado por los propios gestores. Esto introduciría un elemento crucial: la competencia. Con la apertura del mercado educativo, los colegios privatizados se verían obligados a competir por brindar la mejor calidad educativa. Este enfoque, respaldado por la filosofía liberal clásica, busca mejorar la calidad mediante la competencia, a diferencia de la gestión estatal monopólica que ha demostrado ser ineficaz.
La privatización no implica exclusión. Para garantizar la accesibilidad a la educación, la propuesta liberal clásica incorpora la entrega de cheques escolares a estudiantes de bajos recursos. Este enfoque es una alternativa eficaz para garantizar que, incluso durante la transición hacia un sistema educativo completamente privado, aquellos en situaciones económicas desfavorables no se vean privados de la educación.
El actual sistema educativo no solo enfrenta problemas de gestión sino también crisis financieras. Más de 3 mil colegios públicos acumulan deudas, lo que ha llevado a cortes de agua que afectan a más de 1.3 millones de alumnos. Este deterioro financiero indica una clara falta de responsabilidad y eficacia en la administración de los recursos destinados a la educación.
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Sunass
La Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass) identificó que la morosidad en el pago del servicio de agua afecta gravemente a los colegios públicos. Con la privatización, la responsabilidad financiera se transferiría directamente a los gestores de las instituciones educativas. Esto alentaría una gestión más eficiente de los recursos y aseguraría que las cuentas estén al día desde el inicio del año escolar. El Ministerio de Educación no tendría razón de existir.
La gestión descentralizada también aborda la disparidad geográfica en la calidad de la educación. La región de La Libertad lidera la lista de colegios con cortes de agua, seguida por otras regiones. La privatización permite a las comunidades adaptar la educación según sus necesidades y recursos, en lugar de depender de una gestión centralizada que no puede abordar eficazmente la diversidad geográfica y cultural del país.
En resumen, la propuesta liberal clásica para la educación en Perú aboga por una privatización completa, desregulación y apertura a la competencia. Esto no solo abordaría problemas financieros y de gestión, sino que también mejoraría la calidad educativa al incentivar la competencia. En tiempos en que más de 3 mil colegios públicos enfrentan problemas críticos, la adopción de este enfoque se vuelve imperativa para garantizar un futuro educativo sólido y justo para todos los peruanos.