Tenemos un futuro por escribir
'Queridos humanos'... así comienza el vídeo que, en esta era de hiperconexión, de cambios constantes y de continua transformación, la 'inteligencia artificial' nos dedica. Si hemos sido capaces de programar un código de solo 27 caracteres que ha alumbrado, gracias a las mentes ingeniosas y creativas de grandes escritores y estudiosos, libros y textos que nos han hecho estremecer, soñar, llorar, reír, volar... ¿Vamos a ser tan torpes de maltratarlo?
En esta vorágine de algoritmos y analítica, en este periodo en el que parece que hemos perdido el sentido de comunicar y no somos capaces de comunicar con sentido, quizás este mensaje provoque que nos replanteemos no sólo cómo escribimos sino, también, cómo sentimos.
🌟 Inmortal... así es nuestra lengua. Ilimitada... Y así también es nuestra capacidad para sigamos siendo seres sociales. El mensaje que la 'inteligencia artificial' tiene cierto punto de reprimenda puesto que los límites de nuestro lenguaje son 'los límites de nuestra imaginación'. Podemos contar y recrear universos, dibujar y detallar acciones y reacciones, imaginar lugares y situaciones, hacer creer verdades y mentiras, desvelar misterios y ocultar certezas.
💥 Nuestras preguntas han sido capaces de cambiar la historia. Nuestras ideas han posibilitado que crezcamos, aprendamos, valoremos y juzguemos. Y en este tiempo en el que parece que prefijos como in-, des-, a- o sub- están de moda ¿por qué no valoramos que este código, nuestra lengua, tiene infinidad de posibilidades para transformar esos sufijos en palabras que tengan otro significado?
No perdamos esta oportunidad. Yo me dedico todos los días a escribir pequeños retazos de todo lo que la compañía en la que trabajo hace y quiere compartir. Intento, a pesar de las limitaciones de espacio que tenemos cuando redactamos en redes sociales, usar nuestra lengua siempre con la corrección oportuna. Os contaré que los límites de 240 caracteres han hecho que agudice el ingenio, busque sinónimos, indague en formas distintas de decir las mismas cosas. Y puedo decir que ¡qué suerte tenemos!!
Tenemos 27 letras para hacer mover las almas, para despertar sonrisas, para alentar ánimo, encender opiniones... ¡qué suerte tenemos!
🗣Leamos y hablemos. Solo ocho letras para abrir la puerta a infinidad de ratos, temas y sentimientos. ¿Vamos a desperdiciar este magnífico código con todo lo que nos permite?
Yo, desde luego, no voy a hacerlo. 🤓