Tiempo de esperanza
Para llegar al mensaje que quiero transmitir, quiero hablarles de lo poderosa que es la esperanza de vivir y la actitud con la que tomemos los eventos que nos pasan en la vida; estuve leyendo un poco de Viktor Frankl (gracias a un podcast que escuché de la escuela internacional de líderes).
Fue un neurólogo, psiquiatra y filósofo austriaco, fundador de la logoterapia y análisis existencial. Sobrevivió desde 1942 hasta 1945 en varios campos de concentración nazis, incluidos Auschwitz y Dachau.
Leyendo un poco la historia es evidente que en Viktor Frankl, al igual que en los demás que estaban en los campos de concentración, tenía un instinto básico de supervivencia que le impulsó a resistir con entereza la reclusión. No obstante, lo que más adelante llamaría “búsqueda de sentido” según los parámetros de su logoterapia, representa un elemento clave para entender por qué, mientras tantos otros murieron dentro de los campos de concentración a pesar de la urgencia biológica de sobrevivir, él fue capaz de hacerlo guiado por una motivación de orden superior: su propósito de vida.
“Cuando nos hallamos en la problemática de no ser capaces de cambiar una situación, nos enfrentamos al enorme desafío de cambiarnos a nosotros mismos”
La actitud con la que tomemos todas las eventualidades de nuestra vida es la que nos va a volver un “sobreviviente”. Tenemos que ser capaces de cambiar la actitud y ver todo de la manera más positiva, pensando que lo que está pasando es solo un capítulo más de nuestras vidas y que pronto pasará y vendrán otros mejores. En estos tiempos del Covid-19 es muy importante transmitirle ese mensaje de esperanza e inyectar esa energía para el cambio de actitud a las personas que nos rodean, todas las malas noticias sobre contagios, muertos y como avanza el virus hace que muchos estén en un estado de temor y que pierdan las esperanzas de salir adelante; que todo va a terminar pronto.
Como líderes (familia, trabajo, amigos, etc.) tenemos esta obligación, hacer la función de un winch, tenemos que sujetarnos de un árbol y tirar del carro que esté atascado.
A todo aquel miembro de nuestra familia, equipo de trabajo, amigo que veamos en esta situación hay que remolcarlo y hacer que salga del atascadero. Esto va a ayudar a no perder las esperanzas y a seguir adelante, a ser fuertes y darle vuelta a esa página de este capítulo que todos queremos pasar y retomar la normalidad de nuestras vidas.
“Una vez que le damos un significado a la vida, no solo nos sentimos un poco mejor, sino que además, también hallamos la capacidad de lidiar con el sufrimiento”
Así, encontrar un propósito, descubrir el significado de nuestra vida, es verdaderamente transformador porque todo cambia hasta la propia capacidad para afrontar la adversidad. Pues teniendo un “por qué” es posible hacer frente a todos los “como” porque cualquier sufrimiento se convierte en un desafío.