UNA VEZ MAS SOBRE LA CALIDAD DE LAS DECISIONES

Luis Alejandro Rizzi X @007Rizzi

Hace unos cuantos años, viajaba regularmente entre Buenos Aires y Mar del Plata.

En uno de los regresos recuerdo que se desencadenó una fuerte tormenta y el despachante de Mar del Plata, me decía que la ruta hacia AEP estaba complicada.

Cuando aterrizó el vuelo procedente de AEP, resultó que el capitán era no solo conocido sino amigo, en esa época era abogado de APLA, hablo de fines de 1969.

Jorge, era el nombre del capitán, me ratificó que había venido directo y se movió bastante y dos pasajeros se descompusieron, regresaré por otro lado que está bueno, aunque gaste unos dólares más.

Despegamos hacia el mar, viró en dirección sur y mas o menos en la vertical Miramar fuimos hacia Azul y desde allí directo a Aeroparque, el vuelo fue absolutamente tranquilo y duró unos 55 minutos, diez o quince más de, lo “normal”.

Es cierto, ese vuelo tuvo un costo mayor a lo presupuestado, pero ese mayor costo generó mayor tranquilidad para los 90 pasajeros.

El avión era un 737-200.

No tengo duda que el capitán del vuelo tomó una decisión de buena calidad

Llevo ese ejemplo a la política, creo que muy pocos podrían discutir seriamente los objetivos politicoeconómico del gobierno de Javier Milei.

Sabemos que el país está en una virtual situación terminal y que los principales indicadores así lo acreditan. No es necesario recordarlos, todos los conocemos.

El gobierno en este momento solo tiene posibilidades de administrar extrema escasez, pobreza e indigencia.

Como marco tenemos servicios públicos de mínima calidad, inseguridad personal y colectiva y estamos asolados por el narcotráfico y el marco político que la hace posible, la corrupción generalizada, en la que no sabemos a quién sirven los servicios de seguridad pública.

Las cárceles dejaron de ser “… sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas, y toda medida que a pretexto de precaución conduzca a mortificarlos más allá de lo que aquélla exija, hará responsable al juez que la autorice”, para convertirse en verdaderos cuarteles del delito.

Sin embargo, lo que se advierte, además de lo que pregunta Carlos Pagni en su nota de “La Nacion” sobre ¿Qué lugar ocupa en la agenda del Gobierno la preocupación por la calidad institucional? 

A esa pregunta debemos agregar esta otra ¿“cuál es la calidad de las decisiones que adopta el gobierno Javier Milei?

Parecería que eligió el camino directo que es el más escabroso y ante cada obstáculo opta por reputear a diestra y siniestra”, como dice Carlos Pagni, “nido de ratas”, “degenerados fiscales” o “ensobrados” y otros epítetos que solo denuncian impotencia, incapacidad o simple “populismo de outlet”.

El gobierno está tomando decisiones sin calidad, el despido de Giordano del ANSES, el retiro de la ley  bus, por ignorancia, el mismo DNU 70, la licuación financiera y la suspensión de pagos, la suspensión indiscriminada de toda obra pública, la propuesta para Jueces de la Corte, de Lijo y de  García Mansilla, que debió rechazar la postulación hasta que el Dr. Maqueda presente su renuncia o se jubile, la propuesta para cubrir el cargo de la Auditoría general de la nación de un abogado seriamente cuestionado..

En fin, el rumbo es correcto, pero no se advierte idoneidad ni calidad en las decisiones que se vienen tomando.

Parecería que el gobierno se guía por sus brotes neuróticos circunstanciales.

En fin, las decisiones del gobierno lastiman y precintan algún nivel de sadismo y de incoherencia.

Quizás se llegue,¿ pero a que precio y en que tiempo..?