Yo desnudo personas

Marcando la Diferencia desde el Principio: La Importancia del "Por Qué" en la Presentación Personal

Imagina esta situación: estás en una reunión y alguien te pregunta, "¿y tú qué haces?". En lugar de responder con una descripción común de tu profesión, podrías sorprender a todos diciendo algo como: "Yo desnudo personas". Luego, dejas que la pregunta cale y la curiosidad se apodere del ambiente. "¿Cómo?", podrían preguntarte. En ese momento, tienes la oportunidad perfecta para explicar que eres psicólogo y que tu misión es ayudar a las personas a despojarse de sus miedos y enfrentarlos.

Otra situación: te preguntan, "¿A qué te dedicas?". Podrías responder con algo intrigante como: "Yo creo hogares felices". Dejas que la frase se instale en la mente de tu interlocutor y luego explicas que eres agente inmobiliario y tu objetivo es encontrar hogares donde las personas se sientan felices y cómodas.

Y qué tal esta respuesta: "Yo hago que la gente duerma tranquila: soy abogado especializado en temas tributarios". Una vez más, permites que la pregunta se desarrolle en la mente de la persona antes de dar una respuesta completa.

Es crucial entender que el "por qué" detrás de lo que haces puede tener un impacto significativo en cómo te perciben los demás. Esta estrategia de comunicación, popularizada por Simon Sinek en su famosa charla TED titulada "Comienza con el Por Qué", se ha convertido en una herramienta poderosa para aquellos que buscan destacarse en un mundo saturado de información.

Sinek argumenta que las grandes empresas venden de una manera diferente: no comienzan explicando qué hacen, sino por qué lo hacen. Un ejemplo clásico es Apple. Si observas sus comerciales, notarás que nunca el protagonista es la computadora. En su lugar, se centran en las personas y en cómo sus productos pueden mejorar sus vidas.

Un comercial icónico lanzado por Steve Jobs cuando regresó a Apple presenta a Albert Einstein, a los hermanos Wright y a otros rebeldes e innovadores. El mensaje es claro: si eres uno de ellos, entonces eres parte de la familia Apple. Este enfoque no se trata solo de vender productos, sino de vender una filosofía, una forma de ver el mundo.

Es esencial entender que la presentación personal va más allá de simplemente enumerar tu ocupación. Se trata de transmitir tu pasión, tu propósito, tu "por qué". Cuando alguien te pregunta "¿a qué te dedicas?", tienes la oportunidad de contar tu historia y dejar una impresión duradera en la mente de la persona que te escucha.

El poder del "por qué" se extiende más allá del mundo empresarial. En nuestras interacciones diarias, en nuestras relaciones personales y profesionales, el enfoque en el "por qué" puede generar conexiones más profundas y significativas. Al compartir tu verdadera motivación y propósito, puedes inspirar a otros a hacer lo mismo.

Entonces, la próxima vez que te pregunten "¿a qué te dedicas?", no te limites a dar una respuesta estándar. En lugar de eso, comparte tu "por qué" y observa cómo cambia la dinámica de la conversación. Al hacerlo, estarás marcando la diferencia desde el principio y estableciendo una base sólida para futuras interacciones.