YUJA WANG: EL PERFECTO EQUILIBRO EN EL PIANO
Nota: Esta publicación corresponde al domingo 10 de febrero, en que Yuja Wang celebró su cumpleaños 32. Lamentablemente tuve una crisis de Vertiginosis y no pude hacer mi entrega. Ya puedo escribir y qué mejor que hacerlo sobre la genial pianista, para hablar del preciado valor de recuperar el equilibrio.
1. TOCANDO EL PIANO, NIVEL ASIÁTICO
Hay un dicho, o suerte de Ley de Murphy, que asegura “no importa qué bien lo hagas, siempre habrá un asiático que lo hará mejor”. Miles y miles de videos de YouTube parecen confirmar esta regla en la que, desde andar en una patineta hasta pilotar una nave especial, siempre habrá un oriental extraordinario y la música clásica y de conciertos no está exenta de ellos.
A lo largo y ancho del nuevo siglo orientales brillan en la interpretación de la música occidental como asombrosa naturalidad, desde los indispensables compositores chinos Cheng Yi y Tan Dun, el virtuosos pianista Lang Lang, el incomparable chelista Yo-Yo Ma (nacido en Paris de padres chinos), la violinista japonesa Akiko Suwanai, la violinista Sarah Chang (estadounidense de ascendencia coreana) y por supuesto, la inefable Yuja Wang. La lista de orientales en la música crece cada día y nos deja con la boca -y oídos- abiertos.
Yuja Wang es una de las más sobresalientes e importantes artistas de su generación; una intérprete deslumbrante, sencillamente magistral, con un talento enérgico y sutil en partes iguales, que le dan el prodigioso equilibro musical que hace de la clásica un lenguaje tan vigente y fresco como el rock más moderno.
Aunque Wang se educó musicalmente en Occidente, irrumpió en el mundo de los conciertos como alguien llegado del futuro, con nuevas reglas que no corresponden a las de este mundo. Conocerla, oírla, es como recibir un balde de refrescante agua fría en medio de un desierto. Y usted se preguntará conmigo ¿quién diablos es esa Yuja Wang?
FRANK LISZT + BRUCE LEE + ALICIA KEYS = YUJA WANG, LA FÓRMULA DEL ÉXITO
Con ella, ninguna metáfora falla o exagera. Yuja Wang nació en Pekín, el 10 de febrero de 1987, en el seno de una familia de artistas de una fuerte tradición musical. Su madre, Zhai Jieming, es la fecha bailarina, y quizá eso explica en Wang su obsesiva devoción por su propio cuerpo, elemento que se ha convertido en sello personal de su carrera, pues es además una de las mujeres más bellas y atrevidas de la música, vistiendo diminutos y elegantes vestidos que distraen a primera impresión, pero que pasan a segundo plano tan pronto empieza a tocar. Quizá la única artista de formación pianística de conservatorio, capaz de vestirse como ella y derrochar sensualidad y talento, sea Alicia Keys. Aunque la única ventaja que la estadunidense lleve sobre la china es haber obtenido 15 Grammys, mientras que Wang ha sido nominada dos veces al Premio Grammy, pero aún no lo ha ganado. Aún.
Anécdota: El crítico de música clásica Mark Swed escribió una crítica sobre su presentación en el Hollywood Bowl, en que se enfoca en el vestido que Wang vestía esa noche, señalando que era tan corto y apretado, que quizá se debió restringir la entrada a los menores de 18 años. Decenas de músicos, directores y otros críticos defendieron a la pianista y arremetieron contra Swed.
Su padre, Wang Jian Guo, es percusionista de orquesta; por lo que Yuja comenzó a estudiar piano a la edad de seis años con la idea de ser concertista. Ingresó en el Conservatorio Central de Música de Pekín a los seis, denotando una innata e inevitable conexión con el instrumento.
Alguien que nació en el 87 seguramente tiene toda su vida documentada. Los primeros videos de entre 1994 al 2000, muestran su temprano debut como recitalista; una pequeña niña a la que prácticamente le cuelgan los pies del banco frente al piano, pero capaz de interpretar implacablemente los repertorios de Chopin y Debussy. A los 14 dejó Beijing para iniciar sus estudios en Canadá y USA, donde estudió bajo la dirección de Gary Graffman en el Instituto de Música Curtis de Filadelfia, de donde se graduó en 2008.
Si hurga bien en internet, podrá encontrar videos de su temprana carrera en los recitales y, con suerte, podrá apreciar su debut en Europa en 2003, ocasión en que interpretó el Concierto para Piano Nº 4 de Beethoven bajo la batuta del inmortal David Zinman. Venía de ganar el Festival de Música de Aspen, para jóvenes pianistas, con tan solo 15. En el registro se aprecia a la orquesta, ni más ni menos que la Tonhalle Orchestra de Zürich, Suiza; y de quienes es ya una habitual visitante y a su director, esperar expectantes en la sala, después de interpretar la obertura, el arribo de la más joven de sus invitadas. A la sala entró una niña, sonriente y desenfadada, vistiendo un elegante vestido de fiesta propio de sus imberbes dieciséis. La Tonahalle Orchestra es una orquesta de rancio abolengo, donde no hay mas ley que la perfección en la música. Jamás discriminarían a nadie, por su edad, raza o condición, cuyo talento sea digno de hacer música con ellos.
En 2006, hizo su debut con la Filarmónica de Nueva York en el Bravo! Vail Valley Music Festival, en Colorado; y ganó el Premio Gilmore Young Artist. En 2009, firmó un contrato exclusivo para grabar con el prestigiado sello Deutsche Grammophon, que lanzó de inmediato su primer álbum, "Sonatas & Etudes", Ese mismo año, la revista Gramophone la nombró Joven Artista del Año, de Classic FM. Nada mal para tener veintidós.
Su natural encanto, atractiva y rockstar, se suma a su impecable rapidez y precisión, por lo que ha sido considerada como la Frank Liszt contemporánea. Su poderosa capacidad interpretativa y su sobrada habilidad han hecho que una de sus más recurridas versiones sea escucharla hacer encores, o bises, que son esas pequeñas demostraciones de talento que algunos instrumentistas otorgan como divertimento para el público luego de un concierto y en respuesta a sus aplausos. Respuesta muy al estilo Mozart, en que se le ha escuchado interpretar, construir y deconstruir obras del genio universal. Verla tocar un encore, es como ver a Bruce Lee jugar ping-pong con los shakos. No se prive de verlos.
3. FELICES 32, YUJA WANG
Desde 2013, su meteórica carrera la ha llevado a alternar con muchas orquestas profesionales dentro y fuera de los USA, incluyendo las de Boston, Chicago, Cleveland, Los Ángeles, Nueva York, Filadelfia, San Francisco y Washington. En otros países ha actuado con la Staatskapelle Berlín, China Philharmonic, Filarmonica della Scala, Toronto Symphony, Israel Philharmonic, London Philharmonic, Orchestre de París, Orquesta Nacional de España, Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, NHK Symphony en Tokio, Real Concertgebouw Orquesta, Orquesta Mozart y Orchestra dell'Accademia Nazionale di Santa Cecilia y, el año pasado, con la Orquesta Sinfónica Nacional, en el histórico Palacio de Bellas Artes, en la Ciudad de México. En 2015, antes de cumplir 30 años, debutó con la Orquesta Filarmónica de Berlín interpretando el Concierto Nº 2 de Serguéi Prokófiev.
A lo largo de su carrera, Yuja Wang ha admitido que se siente muy cercana al repertorio ruso, y lo demuestra con sus interpretaciones de Prokófiev y Chaikovski; sin embargo, hay autores por los que siente particular gusto interpretar, como los es el caso de Brahms y Schubert. Al tocar busca tener una conexión con los autores de las obras para transmitir más al público y eso es apreciable en su ejecución.
Su ritmo de trabajo es muy acelerado pues, según registra su agenda en su página web, tiene cerca de 100 conciertos al año por todo el mundo, y una agenda que se extiende a los próximos 4 años. En 2018, tuvo residencias artísticas en el Carnegie Hall de Nueva York, donde por cierto tiene su actual residencia, a solo unas cuadras del recinto; el Konzerthaus de Viena y la Filarmónica de Luxemburgo. Ese mismo año trabajó bajo la dirección de Claudio Abbado, Gustavo Dudamel y Michael Tilson Thomas.
Ha grabado los álbumes Sonatas & Estudios (2009) con la Sonata n.2 op. 35 de Chopin, la Sonata n. 2 op. 19 de Scriabin, la Sonata en si menor de Liszt y algunos estudios de Ligeti. Transformation (2010) Tres movimientos de Pétrouchka de Stravinsky, las Variaciones sobre un tema de Paganini, de Brahms; La Valse de Ravel y dos sonatas de Scarlatti. Rachmaninov (2011) comprende Concierto n. 2 op. 18 y Rapsodia sobre un tema de Paganini op. 43. Fantasia (2012) comprende obras que van de Rachmaninov y Scarlatti a Saint-Saëns y Liszt. Brahms (2013) con obras del autor. Piano Concertos (2014) comprende Concierto n. 3 de Rachmaninov y Concierto n. 2 de Prokofiev. Y el Ravel Fauré (2015).
Entree los premios que ha recibido es incorrecto no mencionar el Avery Fisher Career Grant Recipient (2010); el Echo Klassik Young Artist of the Year40 (2011); y el Musical America Artist of the Year 2017.
Una forma de acercarse a su carrera y presentaciones es a través de sus cuentas en redes sociales, donde activamente comparte detalles de sus giras, entrevistas y fotografías muy interesantes. Sus cuentas son: yuyawang.official en Instagram y @YuyaWang en Twitter.
El resto lo tiene que vivir usted con sus propios ojos y oídos, porque como usted puede deducirlo, Yuja Wang apenas comienza.
AlfabetizaDigital Founder. Senior Advisor. Innovation & Social Impact; Futures Scenarios; Key Strategic Uncertainties; Digital Society; Professor-Writer-Changer-Maker-International Cooperation-Public Diplomacy.
5 añosY para cuándo escucharemos y nos dejaremos seducir por la incomparable Yuja, en tierras coahuilenses, apreciado Prometeo? Jeje Un abrazo de este enamorado perdido de esta pianista apasionada y extraordinaria, gracias por traerla a estos lares!