#2 Resiliencia: esa palabra de moda...
Cuando el 11 de septiembre de 2001, Rick Rescorla, vicepresidente de seguridad del gigante financiero Morgan Stanley, vio un avión estrellarse contra la torre norte del World Trade Center sabía claramente que hacer: tomó un altavoz y se dirigió a los más de 2,700 trabajadores de la empresa pidiéndoles que evacuasen el edificio de manera ordenada tal y como lo habían hecho en los simulacros.
Pasados quince minutos, cuando el segundo avión impacto con la torre sur, Morgan Stanley había evacuado a casi la totalidad de sus trabajadores ubicados entre los pisos 43 y 74. Solo hubo 7 fallecidos, entre ellos Rick, quien no dejó el edificio hasta que todos sus trabajadores pudieran haber salido.
El caso de Rick Rescorla es conocido y ha sido estudiado por muchos en el pasado, pero me he animado a tomar la historia de este coronel en retiro del Ejército de los Estados Unidos de América, para explicar el significado y la utilidad de una palabra que en estos días está nuevamente “de moda”: la Resiliencia!
A raíz de la aparición a nivel mundial del COVID-19 se ha empezado a mencionar la palabra resiliencia en discursos de autoridades, en noticieros, en artículos de revistas e incluso en las conversaciones del día a día. Pero ¿a que se refieren las personas cuando mencionan esta palabra? Parece una palabra casi mágica, que merece incluirse en nuestros CV´s junto con algunos términos cliché como “proactivo”, “capacidad de trabajar bajo presión” y “eficaz comunicación a todo nivel”.
Si bien es cierto, hay tantos significados como interpretaciones se quieran hacer de esta palabra, hoy estamos aquí porque queremos hablar de la Resiliencia Organizacional. Esa capacidad que tienen las empresas de anticiparse, adaptarse y responder antes las crisis. Pero no solo sobreviviendo, sino, fortaleciéndose en el tiempo.
Vista así, la Resiliencia Organizacional deja de ser un cúmulo de buenas intenciones y deseos de ser mejores y se convierte en una herramienta de gestión, algo medible, y que en consecuencia permite a nuestra organización se mejor.
En base a nuestra experiencia en Protegia, hemos definido la Resiliencia Organizacional en 03 fases basadas en el concepto mismo de esta palabra:
1. Anticiparse: identificar mi proceso más crítico y qué hacer si este falla al 100%.
2. Adaptarse: cuando ese proceso falla debido a un cambio inesperado, como puedo mitigar la situación con lo que tengo a la mano.
3. Responder: identifico las lecciones aprendidas y las implemento en mis procesos.
Si pensamos en la historia de Rick Rescorla, debemos remontarnos a 1993 cuando las Torres Gemelas sufrieron un ataque con bomba en uno de sus sótanos. Este ataque había sido predicho por Rescorla 3 años antes cuando realizó un análisis de riesgos del World Trade Center. Luego de este ataque las recomendaciones de Rescorla cobraron importancia para los ejecutivos de Morgan Stanley, e implementaron entre otras cosas simulacros de evacuación de riesgos de incendio cada 3 meses para todo el personal de la empresa y la creación de 03 centros de trabajo con copias de seguridad, para que en caso de una catástrofe sus trabajadores pudieran continuar con sus negocios.
Llevemos el caso de Rick a las 03 fases de la Resiliencia Organizacional:
1. Anticiparse : entendiendo el riesgo de un potencial ataque a sus oficinas, implementaron un plan con un cumplimiento casi militar de evacuaciones periódicas, con cronómetro en mano para poner a salvo a todo su personal.
2. Adaptarse : ocurrida la emergencia, el líder de seguridad, ósea Rick, puso en marcha el protocolo tantas veces ensayado, activando los responsables por área, por piso y demás. El objetivo era uno: sacar con vida a todos los trabajadores, y vaya si se cumplió!!! (sobre todo sustentado en un sólido sistema de valores al sacrificar su propia vida por un fin mayor, pues se quedó hasta el final buscando salvar a todo su equipo).
3. Responder : pasada la emergencia, todos los trabajadores de Morgan Stanley continuaron con sus trabajos desde los 03 centros remotos donde disponían de toda la información necesaria y estas medidas que para algunos directivos siempre fueron exageradas pasaron a ser parte de la esencia de Morgan Stanley.
En conclusión, sé como Rick, identifica los riesgos de tu organización y sé Resiliente!!!
Agente de la propiedad inmobiliaria certificado en Baldone Gestión Inmobiliaria - Martillero Publico y Corredor de Comercio - Especialista en Tasaciones - Colegiado 727
4 añosExcelente nota !!!!te felicito Carlos.
WS BROKERS. Auditores en Pólizas de Seguros y Reaseguros. Asesoría técnico Legal en Siniestros
4 añosCarlos Miguel, interesante la palabra "EL SEGURO DESPUÉS DE MAÑANA" ojala evolucionen las compañias de seguros. Mi palabra es "LA HORA DE LA VERDAD ES CUANDO OCURRE EL SINIESTRO" el resto es baba; perdon falto ALI
Sustainable Value | Growth | Profitability
4 añosSuper válido, pero lamentablemente se tiene en cuenta sólo cuando el agua la tenemos al cuello y no de manera proactiva y previsional. Valioso ángulo, gracias Carlos Miguel Caro Custodio
Especialista en Continuidad del Negocio, Gestión de Riesgos y Seguros
4 añosCarlos, gracias por compartir e invitarme a leer tu artículo. Complementando con tu gran historia es importante identificar que la crisis se resolvió por el plan de continuidad comprendiendo las acciones inmediatas (evacuar) y las acciones de restablecimiento del proceso crítico para lo cual requerían las sedes alternativas. A mi parecer la Resiliencia Organizacional se incuba al aceptar los directivos de Morgan Stanley las recomendaciones del Sr. Rescorla debido a la bomba en el sótano. Luego se cultiva en la organización mediante los simulacros y seguramente mucho trabajo relacionado la cultura de la empresa. La lección que tomaría de esta historia es como prepararnos para un escenario de riesgo puede brindarnos la Resiliencia Organizacional para resolver uno muy distinto.
Winner - Americas 2024 Insurtech Innovation Awards | CEO de Firefly Digital | Transformando canales de distribución con estrategia, IA y omnicanalidad
4 añosMuy buen artículo, anticiparse, adaptarse y responder. Necesario para mantenerse vigente