ESCENARIOS EN LA ORGANIZACIÓN EMPRESARIAL (3 de 64)
Número 3. DIFICULTADES INICIALES
Todo un clásico, los comienzos difíciles, que llevan implícitos una mala noticia y una buena:
1. La mala es la incomodidad derivada de la dificultad que se nos presenta;
2. La buena es su carácter temporal y pasajero.
También es cierto que debemos distinguir entre una dificultad transitoria y un mal de raíz, de consecuencias mucho peores e incluso fatales, según abordaremos en algunos de los próximos escenarios.
Para realizar esta distinción necesitaremos de la capacidad analítica con la que todos contamos, pudiendo ver rápidamente si disponemos o no de la base, recursos y potencial para saber que estamos, simplemente, ante un arranque difícil, pero para nada imposible.
Este escenario es a su vez prometedor, pues nos enseña la luz al final del túnel, siempre que mantengamos valores como la confianza en nosotros mismos, la constancia, el espíritu autocrítico, la flexibilidad, la contención y la capacidad de buscar asociaciones y/o de pedir ayuda.
Será pues útil evitar el trabajo en solitario así como el compromiso a largo plazo, pues desconocemos cuánto durará este periodo “emocionante” y qué cambios deberemos afrontar para superarlo, hasta llegar a un primer punto de estabilidad.
En una frase: Las dificultades iniciales se combaten con trabajo constante, confianza y con alianzas, rara vez en solitario y nunca con miedo y ansiedad.
Jaume Gran
B2D