¿ESTA PENSANDO ALQUILAR SU PROPIEDAD?

Alquilar nuestra propiedad nos da la posibilidad de obtener ingresos rentables, aún más que muchos otros negocios que podríamos emprender, claro que eso dependerá del tipo de propiedad que alquilemos, de la zona donde se encuentra, su metraje y características, etc. No obstante esto no deja de tener ciertos riesgos, como tener un inquilino que no pague el monto del alquiler, (esto suele ser el mayor problema que existe), o que después de vencido el contrato de alquiler no quiera dejar la propiedad, es por eso que debemos tomar ciertas precauciones antes de tomar la decisión de entregar nuestro inmueble en alquiler.

Lo primero y más importante es buscar la asesoría de un Profesional Inmobiliario que cuente con su registrado del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento del Perú, quien lo ayudará en todo el proceso de alquiler.

Buscar un inquilino que cuide la casa como si fuera suya y que además sea puntual en el pago no es tarea facil, pero tampoco es misión imposible. Algunas recomendaciones que se deben tener en cuenta a la hora de buscar un buen inquilino son:

-      Revisar la solvencia

Un contrato de trabajo es suficiente para saber si cuenta con ingresos regulares, solicitar el DNI de la persona que será el titular del contrato de alquiler, además de la información necesaria para conocer su historial crediticio y todo aquello que pueda servir como garantía adicional de pago en caso de problemas con la propiedad. Es importante pedir referencias de otros propietarios con los que el inquilino haya tenido relación.

-      Leer entre líneas

Las familias con hijos suelen ser más estables que los solteros. Además, un profesional inmobiliario, puedes desplegar su experiencia para conseguir información relacionada con la profesión y el estilo de vida de los inquilinos.

 -      Desconfiar del inquilino perfecto

Comprobar todo lo que este le dice y tome una decisión consciente. Existen auténticos profesionales que inicialmente le darán una buena impresión y que luego dejan de pagar. Recuerde que no es una buena práctica pagar varias mensualidades de golpe, suele ser un engaño que puede dañar seriamente su reputación, si llegado el caso el inquilino dejará de pagar.

 -      Ajuste el precio

Es importante es conocer bien las fluctuaciones del precio para poder decidir si es posible ajustar el monto de arriendo mensual. Para ayudarlo, el agente inmobiliario deberá manejar un estudio de mercado de la zona, en el cual usted tendrá acceso a los datos de los alquileres semejantes que pueden ser un buen argumento cuando se negocie el precio final. También es una opción sugerirle que realice mejoras en la vivienda. Está comprobado que aquellos inquilinos que viven en inmuebles mejor conservados tienden a cuidarlos mejor. Es el conocido como efecto “cristales rotos”.

-      Cumpla con la normativa

Respete el contrato en cuanto a el tiempo de duración, así como los días de mes que el inquilino pagará la renta. Por tanto, no intente insertar cláusulas abusivas, no sería la primera vez que un juez le diera la razón a un inquilino en situación de indefensión jurídica. Normalmente se especifica qué gastos se incluyen en el contrato y quién debe asumirlos.

 -      Trate con el inquilino personalmente.

Un contrato de alquiler no es una hipoteca, pero sí es una relación entre inquilino y propietario que puede durar mucho tiempo, por eso es conveniente que hable las cosas directamente.

 - Redacte un buen contrato.

Ya se ha mencionado la importancia de no incluir cláusulas abusivas en los contratos, o se podrán volver contra usted. Además, le recomendamos que consulte con su agente inmobiliario sobre lo que debe ir en su contrato y que sea equitativo tanto para propietario como para el inquilino de manera que relación entre ambos sea lo más fluida posible.

Entre los trámites necesarios de cómo alquilar un inmueble de forma segura, deberá prestar especial atención a realizar un inventario antes de la entrega de llaves, hacer fotos de todo aquello que pertenezca al propietario, incluso si la propiedad se alquila vacía, tomar fotos al estado de las paredes, pisos, techos, sanitarios, etc. Las reclamaciones a posteriori pueden ser mucho más complicadas. Además, este inventario debe estar firmado por propietarios e inquilinos.

 -      No se olvide de los impuestos.

Cuando se alquila una propiedad, se debe pagar el impuesto a la renta de 1ra. Categoría, monto que es equivalente el 5% de la renta mensual.

 -      Depósito de garantía y seguro.

Es importante y necesario solicitar un depósito como garantía, que por lo general corresponde al valor de dos mensualidades, el cual servirá en caso de que el inmueble no sea devuelto en igual estado como se entregó. ahora, es cada vez más frecuente encontrar propietarios que exigen garantías extra, es el caso de avales solidarios, el cual tendrá responsabilidad de asumir el pago de la mensualidad en caso el inquilino no lo haga. Por último podría también solicitarse un seguro del hogar que incluya la responsabilidad civil. Si la propiedad está hipotecada, suele llevar uno asociado, pero si está pagada, conviene tener uno para evitar sustos.

 -      Permita que se puedan hacer mejoras en la vivienda

En caso que durante el periodo de vigencia del contrato de alquiler, el inquilino realice obras de mejoramiento, este debe dejar constancia por escrito al propietario, además de presentar las respectivas facturas que demuestren que, efectivamente, estas reformas se han llevado a cabo.

 -      Cuide de su inquilino

Un alquiler puede ser un negocio muy rentable. Por eso, tener un contrato con un inquilino que es puntual en el pago de la renta y no da problemas, es una mina de oro. Regatear por una reparación o negarse rotundamente a una bajada del precio pueden ser posturas poco razonables si se encuentra un inquilino solvente y serio.

 -      Un Profesional Inmobiliario le podrá ofrecer aún más servicios.

Un profesional inmobiliario,  le ofrecerá todos los servicios de gestión de alquileres, que van desde el buscar y encontrar al inquilino más idóneo para su propiedad, hasta gestionar la cobranza de las mensualidades, encargarse de solucionar problemas de mantenimiento, atender reclamos y toda gestión entre propietario e inquilinos.