Gracias a ti papá, tengo mejores hábitos de trabajo
Ayer fue Día del Padre, y no puedo dejar de pensar en todas las cosas que aprendemos de los padres en el ámbito laboral. Esto para muchos puede parecer lógico, pues nuestros padres son nuestra principal fuente de inspiración, aprendemos desde que somos pequeños de su ejemplo; puedo decir que hay tantos hábitos que tengo gracias a papá.
Enumeremos solo algunos de ellos para tenerlos presentes en nuestra dinámica del día a día.
Papá me enseñó a ser comprometida con mi trabajo.
Algo de admirar, el compromiso y dedicación que tiene en su trabajo. Recuerda que lo veía salir todos los días a la misma hora a su trabajo: bañado, vestido y perfumado. Cada vez que le preguntaba si ya se iba me decía con una sonrisa.
Donde no hay compromiso, no hay éxito.
Eso se quedó conmigo para saber que con compromiso nos hacemos grandes profesionales, solo con compromiso nos hacemos fuertes y valerosos en nuestros trabajos: independientemente de trabajar en un proyecto personal o para alguien más.
Papá me enseñó a ser compasiva y empática.
Mi padre desempeño cargos de trabajador y de alta gerencia, nunca se le olvidó cada una de las preocupaciones y aspiraciones que tenía en sus cargos. Siempre me hizo saber que era sumamente importante ponerse siempre en los zapatos del otros, ser justos en todo momento con empleados y compañeros de trabajo.
Al final, eso es lo que importa: saber ser empático con el otro para poder hacer una buena dinámica laboral.
Papá me enseñó a el valor de la integridad y honestidad.
Mi padre siempre era una caja fuerte con su trabajo; yo siempre intentaba sacarle grandes secretos de la compañía para la que trabajaba. Siempre me decía que las cosas que le contaba su jefe o equipo de trabajo no las tenía que estar conversando con nadie.
Incluso con mamá, se reservaba cosas para él.Igualmente, siempre nos hablaba de lo importante que era ser honestos, el valor de hacer las cosas bien aun cuando nadie te está mirando.
Gracias papá, solo puedo darte gracias porque gracias a ti puedo decir que he contruído los mejores hábitos y virtudes laborales.