Los Héroes españoles de la Bretaña francesa

La explosión fue tan grande que convirtió la noche en día. El enemigo había minado una cortina de la muralla, logrando abrir una importante brecha en el fuerte español. Los soldados ingleses fueron los primeros en abalanzarse por el hueco, seguidos de los franceses. Una descarga intensa de los arcabuceros españoles les dio la bienvenida. La lucha fue muy violenta. Ante la escasez de munición, algunos arcabuceros españoles, disparaban ya monedas y pequeñas piedras. Dos horas después, la lucha cesó.

15 de octubre de 1594. El mariscal D'Aumont al mando de un ejército compuesto por 3.000 franceses y 2.000 ingleses, llega al extremo nororiental de la península de Roscanvel, una extensión al norte de la península de Crozon que cierra la rada de Brest. Tiene intención de desalojar a los 300 soldados españoles atrincherados en el pequeño Castillo del León, que están allí por orden de Felipe II, que apoya a los católicos de Bretaña en su lucha contra los protestantes de Enrique de Borbón.

La posición española no es fácil de tomar. Construido sobre una roca acantilada de 70 metros de altura y rodeada casi por completo por el agua, la fortaleza parece inexpugnable. D'Aumont la somete a un intenso bombardeo desde tierra y por mar. Dentro, los soldados españoles resisten al enemigo e incluso realizan arriesgadas salidas nocturnas que logran inutilizar más de un cañón enemigo. Es una lucha despiadada, sin cuartel. Pero los protestantes, pese a su gran superioridad numérica, no logran acabar con los españoles.

D'Aumont siente cada vez más presión. Sabe que el maestre de campo español Juan del Águila va hacia allí con 4.000 soldados y 2 cañones para ayudar a los sitiados. El 17 de noviembre una mina abre un hueco en la muralla y los protestantes acaban con la última resistencia. Un mes de intenso combate y más de 3.000 bajas les ha costado la victoria. De las ruinas del fuerte salen 13 supervivientes que son escoltados a territorio español. Al verlos el Del Águila les preguntó: "¿De dónde venís, miserables?". A lo que le respondieron: "De entre los muertos".