Los Siete Elementos del Éxito Sustentable: Formación de Liderazgo

Desde hace mas de veinte años, Telos Partners ha trabajado con organizaciones que se están esforzando para desempeñarse de forma optima a largo plazo; para satisfacer las necesidades de sus stakeholders actuales, pero también asegurar el éxito para los del futuro.  A través de nuestra experiencia, creemos haber sido testigos de los componentes imprescindibles que conducen al éxito sustentable. Ningún componente proveerá todas las respuestas por si solo, pero juntos proporcionan un marco para que una organización encuentre su camino.  Llamamos a estos siete elementos el ‘espiral’ o ‘swirl’- una imagen que muestra la dinámica necesaria en toda organización que perdure en el tiempo.  

En la segunda entrega de esta breve serie de artículos, vamos a examinar el segundo elemento critico de la espiral, la formación de liderazgo.  Encontrará nuestro punto de vista sobre el primer elemento, la autodeterminación y ambición, acá. 

Elemento 2: Formación de liderazgo

Aunque la ambición impulsadora nace con un individuo dentro de una organización, ser la persona que sostiene la llama parpadeante de esta ambición puede ser muy solitario.  Por eso, las organizaciones exitosas aseguran reclutar mas portadores de la antorcha.  

En los primeros días de la vida de una organización, estos portadores no serán necesariamente un equipo de liderazgo, pero con el paso del tiempo, terminarán formando un equipo y avalando colectivamente el éxito de la organización – o se irán en busca de nuevos horizontes. La intensa energía alrededor de un sistema emergente de creencias significará que los que no creen en el futuro de la organización se irán y serán reemplazados por personas que sí creen.  

Observamos que las organizaciones que piensan a largo plazo prestan atención a, e invierten en, la forma en que sus equipos de liderazgo forman y mantienen sus creencias y su energía colectiva. Estas organizaciones aseguran que los puestos de liderazgo siempre están ocupados por individuos de alto desempeño, y se enfocan en las conductas necesarias para que estos individuos se conviertan en verdaderos lideres.  Los preparan para motivar a otros e incentivar las conductas necesarias para el éxito, no solamente el desempeño.  Además, invierten para que los lideres se conviertan en un equipo, no se dan por hecho que trabajarán juntos de forma efectiva desde el día uno.   

Las organizaciones mas exitosas son las que saben construir equipos en el sentido real – “un pequeño numero de personas con capacidades complementarias, comprometidas con un propósito común, metas de rendimiento, y enfoque por lo cual ellos son mutuamente responsables de rendir cuentas”[1].   Lograr esto requiere tiempo y compromiso.  Además de alineamiento y compromiso mutuo, el equipo tiene que encontrar y explorar conductas y maneras de trabajar que apoyen su creciente ambición y sus metas de rendimiento en común.  Si no se dedica tiempo a trabajar en estos aspectos, suelen aparecer las disfunciones comunes de un equipo[2]que tiran abajo primero su propio rendimiento, y eventualmente el rendimiento de la empresa entera.   

Además de crear un equipo de liderazgo de alto desempeño, es critico desarrollar cada individuo como líder.  Eso significa mucho mas que asistir a un programa de desarrollo.  Será a través de distintas actividades: exposición a oportunidades y amenazas importantes, interacciones con stakeholders claves, conversación informal en reuniones de equipo, mentoreo, exposición a otras organizaciones, por decir algunas.  Tampoco el desarrollo de las capacidades de liderazgo debería esperar hasta que una importante promoción está inminente.  Mas bien, es un compromiso al desarrollo de todos, dentro de un marco definido de capacidades y conductas.

Algunas preguntas para hacerse para entender si deberían prestar atención a este aspecto en su organización:

1.    Los puestos claves del equipo de liderazgo están ocupados por individuos que comparten una visión sobre el éxito a largo plazo de la organización?  Están dispuestos a tomar la responsabilidad para lograrlo?

2.    Estos individuos tienen las capacidades para contribuir exitosamente al liderazgo de la organización?

3.    Sus actitudes están alineadas con la ideología de la organización?

4.    Hay abertura y transparencia dentro del equipo para que sus miembros interactúen plenamente en el desarrollo de la organización, desafiándose donde sea necesario?

5.    Existe el deseo y el compromiso de convertirse en un equipo de alto desempeño?

6.    Existe compromiso por parte del equipo de liderazgo a generar motivación y compromiso en sus propios equipos? 

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[1]Katzenbach, J. R. and Smith, D.K. (1993), The Wisdom of Teams: Creating the High-performance Organisation, Harvard Business School, Boston

[2]Lencioni, Patrick (2002), The Five Dysfunctions of a Team, Jossey-Bass, San Francisco.