Tanto se habla de la Capacitación hoy en día, que necesitamos recordar -sencillamente- de que se trata

Cada día vemos que es mayor la cantidad de compañías y organizaciones dedicadas al entrenamiento, capacitación o formación de personal, con una amplia diversidad de metodologías, enfoques, visiones y especializaciones. Y por otra parte, las empresas tambien hacen cada día mayor énfasis en dicho concepto, si bien es discutible tanto forma y fondo del mismo en la mayoría de ellas (sobre todo en las que no son consideradas “ganadoras” o líderes del mercado).

Sin entrar en la necesaria discusión de las razones de esta proliferación masiva (material digno de un análisis aparte); siempre recuerdo lo señalado por Jack Trout en su Libro “El Poder de lo Simple”, en cuanto a que la búsqueda de la complejidad no es más que la incapacidad de ver las cosas como son, utilizando la excusa de la innovación y de la necesidad de cambio como justificación suplementaria.

Es por ello, y como bien ahora me dedico formalmente a esta noble actividad, que decidí revisar las ideas básicas en dicho tema para recordar la verdadera grandeza de lo simple.

A continuación algunos conceptos y datos interesantes relacionados que he encontrado:

• CAPACITACION: Según la Real Academia de la Lengua Española, acto de CAPACITAR, el cual a su vez significa “Hacer a alguien apto, habilitarlo para algo”. Otro concepto general encontrado resume: “La capacitación es un proceso continuo de enseñanza-aprendizaje, mediante el cual se desarrollan las habilidades y destrezas de los involucrados, de manera que les permitan un mejor desempeño en sus labores habituales”.

• ADIESTRAMIENTO: Enfoque similar: “Acción y efecto de adiestrar” lo cual es un verbo que indica “Hacer diestro, enseñar, instruir”.

• Napoleon Hill, considerado como uno de los autores de autoayuda y superación más prestigioso del mundo; realizó numerosas investigaciones en cuanto a las destrezas y habilidades de los hombres más exitosos (y ricos) del mundo para su época, encontrándo tres (3) conclusiones básicas:

1. Dichas habilidades y destrezas eran comunes entre ellos

2. Las mismas fueron aprendidas y desarrolladas, no eran innatas

3. No se puede alcanzar un nivel “superior” a menos que se ejerciten y practiquen dichas habilidades de manera constante (al igual que los atletas!)

• Hay una infinidad de estudios que demuestran que el proceso de aprendizaje se relaciona a su vez de manera directa con el tiempo (Curva del Aprendizaje), lo cual también tiene que ver con conceptos tales como retención y tipos de memoria. Es por ello que en la definición anterior de CAPACITACION se habla de un proceso CONTINUO, perdurable y sustentable en el tiempo. La técnica del “Reforzamiento sistemático” es la mayor exponente de esta cualidad del proceso.

• En un estudio realizado a finales del 2010 por la ASTD (Sociedad Americana para el Entrenamiento y Desarrollo, en sus siglas en Inglés), se encontró que de las veinte (20) compañías más prestigiosas y exitosas del mundo, el 100% realiza inversiones considerables en procesos de capacitación de personal y entrenamiento. Dicho estudio también encontró que el 70% de las empresas no consideradas como exitosas, también hacen inversiones en entrenamiento, de menor cuantía (en la proporción $ USD invertidos por número de empleados) pero con una vital diferencia versus las primeras: La mayoría hace entrenamientos en PRODUCTOS o SERVICIOS, no en los PROCESOS inherentes a cada rol o cargo.

• Las últimas tendencias indican que no sólo es necesario capacitar en cuanto a procesos, de manera que las personas desempeñen de manera correcta sus roles y tengan una mejor aptitud; sino que también es necesario capacitar a las personas en cuanto a su actitud se refiere (las mal llamadas habilidades “blandas”); es decir, desarrollar las características y atributos que permiten interactuar con otras personas de manera efectiva.

• La capacitación es una estrategia de éxito, siempre y cuando se corresponda con un plan que se desarrolla en base a necesidades de mejora de un perfil dado en un rol determinado. Es decir, todo rol o cargo, tiene un conjunto de competencias y destrezas claramente definido (el denominado “Perfil”). La capacitación es un proceso continuo que permite cubrir deficiencias o diferencias existentes entre el perfil y el cargo. Cuando la desviación es demasiado considerable, es decir, el perfil no se corresponde con el cargo; todo esfuerzo de capacitación tiene elevadas probabilidades de fracaso.

• Todo proceso de capacitación requiere del aprendiz: a) Deseo de aprendizaje, b) Compromiso al cambio, c) Autoestima y d) Responsabilidad & Disciplina. Sin embargo, de los cuatro (4) mencionados, sin los dos (2) primeros (deseo y compromiso) no hay posibilidades reales de éxito en dicho proceso (por muy bueno que sea el material, la técnica de instrucción y el propio entrenador).

CONCLUSIONES

La capacitación es un proceso continuo no aislado o puntual, que permite el desarrollo de habilidades y destrezas que logran un desempeño efectivo y superior en un rol determinado. Dicho proceso debe ser considerado siempre en función de la relación existente entre el perfil y el rol o actividad a desarrollar, y debe abarcar una ampllia variedad de competencias (duras y blandas) de manera de mejorar significativamente tanto la aptitud (habilidad o experticia en algo) así como la actitud (habilidad de relacionarse con los demás).

La capacitación será exitosa, no sólo si se considera adecuadamente el tema del perfil, sino que también pasa necesariamente por que el individuo involucrado tenga el deseo y ganas de aprender, así como el compromiso de realizar el cambio necesario en cada aprendizaje (disciplina y autosuperación).

Así mismo, todo proceso de capacitación requiere de un enfoque sistemático de reforzamiento continuo, de manera de “fijar” los conocimientos en el tiempo de manera permanente, generando cambios definitivos en el comportamiento y/o desempeño.

Por último se considera a la capacitación como una herramienta estratégica, pues en el mundo de hoy el desarrollar competencias y afrontar nuevas ideas y retos más rápido que la competencia, es sin lugar a dudas un FACTOR CLAVE DE ÉXITO. Se trata pues de tener “gente correcta haciendo lo correcto de manera correcta y generando VALOR diferenciador”.

Así que cada vez que escuche a un Gerente o Líder de negocios hablando del “gasto” que significa una capacitación para que después –inclusive- la gente se marche de la compañía; hagale la siguiente pregunta: “Qué prefieres, que lo capacitemos y luego se vaya (que por cierto, no será por falta de entrenamiento) o que no hagamos nada y se quede?”

Estoy seguro, y después de meditar sobre todo lo anterior, que Usted piensa al igual que yo, sobre cuál es la respuesta correcta!