Tengo una autoestima de 7 y soy una autoestima de 10

Se entiende por autoestima la valoración positiva o negativa que la persona hace de su autoconcepto, valoración que se acompaña de sentimientos de valía personal y auto aceptación

La semana pasada estaba realizando una sesión de coaching con un cliente, trabajando temas de autoliderazgo  y me dijo una frase relacionada con la autoestima que él había incorporado como filosofía de vida y que es precisamente la que da título a este artículo: "Tengo una autoestima de 7 pero soy una autoestima de 10.

Me quedé pensando ¿Podemos tener una autoestima de 7 y ser una autoestima de 10? ¿Qué significa tener una autoestima de 10?

Si partimos de la base de que la autoestima es la valoración positiva o negativa que la persona hace de sí misma,  tener una autoestima de 10 significa que se valora como una persona capaz, digna y merecedor y merecedora de ser feliz.

La autoestima de 10 tiene relación con el ser de la persona, no con su esencia,  con su dignidad,  con quien ella realmente es, y esa autovaloración positiva permitirá que se respete y se haga respetar,  teniendo muy claro cuáles son sus innegociables y líneas rojas pero no va a permitir que otros las traspasen.

La autoestima de 10 es la que tenemos por el mero hecho de ser persona porque es una valía que no depende de lo que se hace, de nuestras acciones,  de nuestras posesiones, de nuestro trabajo, de nuestra posición o de nuestros logros.

 Como ya he comentado en más de una ocasión, la autoestima se forma a partir del feedback, de los mensajes que recibimos y de la relación que tenemos con nuestros padres y otros adultos de referencia importantes en nuestra infancia.

Si hemos crecido en un ambiente en el que sentimos que somos amados, respetado, que confían en nosotros mismos y que somos valiosos,  independientemente de que a veces nos equivoquemos o tengamos conductas que se tengan que corregir,  vamos a ser adultos con una autoestima de 10.

¿Qué significa tener la autoestima de 7?

Cuando una persona afirma que tiene una autoestima de 7, se está refiriendo a cómo se percibe ella en diferentes ámbitos de su vida:  profesional,  personal,  familiar y social.  Hay personas que se identifican con su trabajo, con su estatus o sus logros y basan su autoestima en ellos. Están construyendo una autoestima insana porque, en el supuesto de que pierdan cualquiera de estos aspectos,  su autoestima se verá totalmente afectada pues se cimenta no en el SER sino en el TENER o en el HACER.

Otro de los actores que puede hacer qué situemos nuestra autoestima en un 7 es que la confundamos con nuestras habilidades o competencias. Si soy una persona con una gran capacidad de organización, me puedo poner un 7 o un 8 en ese área; en cambio, si no tengo buenas habilidades comunicativas o siento miedo a la hora de hablar en público me puedo poner una autoestima de 3 o 4. Pero ¿realmente estoy hablando de autoestima?

Esta puntuación no está diciendo nada de mi personalidad ni de mi SER, sino den mis habilidades y destrezas, me está indicando cuáles son mis fortalezas y cuáles mis áreas de mejora

Valorar mi autoestima en base a ellas no es adecuado ya que todos tenemos fortalezas y aspectos a mejorar. Por tanto, dependiendo de dónde pongamos el foco vamos a puntuarnos con una nota más o menos elevada y el resultado obtenido NUNCA va tener que ver con la autoestima porque siempre voy a tener el poder de mejorar, siempre voy a poder formarme y, de hecho, las personas estamos en constante crecimiento. Tal vez hoy no tenga determinada habilidad pero dentro de un tiempo sea un experto en la misma. Por tanto, la cuestión es ¿mi autoestima habrá cambiado: tendré una mayor autoestima o simplemente habré desarrollado nuevas habilidades?

Autoestima y liderazgo

Ser una autoestima de 10, va a permitir a la persona mantener su valía y autoconcepto intacta, independientemente de los factores externos:  críticas no constructivas,  pérdida de trabajo, mobbing, etc. Por supuesto, todas estas experiencias pueden hacer que la persona se sienta mal e incluso que su autoestima pueda llegar a tambalearse, pero su capacidad de recuperación también será mayor.

¿Qué sucede cuando un colaborador o trabajador siente que no se le trata con una autoestima de 10?

 Antes he comentado que ser una autoestima de 10 implica respetarse y hacerse respetar, teniendo muy claros los innegociables y límites que la persona no va a estar dispuesto a que se traspasen.

Eso implica  que un trabajador con una autoestima de 10 va a exigir que se le trate con respeto y con dignidad,  que la empresa faciliten aspectos como la conciliación,  la formación continua, la flexibilidad, el bienestar emocional y la posibilidad de promoción dentro de la organización.

Al ser consciente de que autoestima y capacidades no son lo mismo, estará dispuesto a una continua mejora y si el líder le propone o le sugiere algún cambio de comportamiento o manera de hacer no se lo tomará como algo personal,  siempre y cuando se lo explique con respeto porque la persona es consciente de que puede ser muy buena y competente ciertas áreas y tener que mejorar otras.

Un líder efectivo tiene que tratar a los miembros de su equipo como personas con una autoestima de 10, solo así conseguirá fidelizar el talento.

Y hablo de talento porque las personas con esa autoestima de 10 son talentosas pues llegar a esa nivel de autoconcepto y autovalía implica que ha realizado un importante trabajo de desarrollo personal y autoliderazgo.

Contar con personas de esas características asegura un equipo de trabajo altamente comprometido y con un buen desempeño profesional que estarán dispuestas, si el entorno laboral les es favorable,  a dar la mejor versión de si mismas.