Un hotelero con Vocación
Dirigí el departamento de RRHH de nueve hoteles, 3500 empleados. Antes de eso estudié dirección hotelera. En estos 14 años dedicados a este sector he visto un patrón en las personas mejor realizan su trabajo y además son felices haciéndolo.
La hostelería es un arte. Es la forma en la que transmitimos nuestros sentimientos mediante un complejo programa de servicios. El guest service realiza su magia cuando el cliente viene furioso y se va satisfecho. El cocinero cuando toca los sentidos del cliente. El camarero cuando vela por su bienestar, la camarera de pisos cuando, con ternura, protege su confort.
Hay personas que lo hacen obligadas, pero hay otras que no. Hay otras que tienen amor por una labor bien hecha. Un sentimiento que resume una palabra. VOCACIÓN.
La vocación es la gasolina del hoy y del mañana. En un sector tan competitivo en que cada vez hay menos diferencias en las instalaciones, la vocación ha sido es y será nuestro mejor aliado.
Un hotelero con vocación siente interés por nuevas y viejas técnicas de hotelería y hostelería. De este interés se nutre un afán de poner en práctica conceptos nuevos. Proactividad. Un hotelero con vocación tiene la mejor de las armas, la persistencia. Benjamin Franklin dijo, “la energía y la persistencia conquistan todas las cosas.”
La mejor motivación que podemos dar a nuestros colaboradores es transmitir ese amor. Inspirar vocación.
Alberto Sosa. Coach hotelero.
Aprendiendo constantemente para cumplir los sueños de nuestros clientes
7 añosExcelente artículo, estoy totalmente de acuerdo.
Gerente de la División de Habitaciones / Gerente de Servicios de Alojamiento/ Gerente de Alojamiento
7 añosInteresante articulo, me siento identificado con lo expuesto en el.
Human Resources Business Partner en Lopesan
7 añosGracias a ti Sergio. Presiento que nuestros caminos se volverán a cruzar.
Area Manager en Amazon Logistics
7 añosGran verdad. Cabe destacar y entender que, la profesión hotelera es un oficio (aunque en ocasiones muchos de los valores fundamentales de la misma se vean alterados por cierto intrusismo en la profesión, por suerte ínfimo a día de hoy) y como tal requiere de vocación para llevarla a cabo, valores y sobretodo amor, amor por saber entender esta tan dura profesión y a la par tan bonita y gratificante. Gran artículo Alberto, felicidades y me alegro de haber podido compartir parte de tu experiencia de primera mano, aunque fuera por tiempo reducido, gran profesional del sector. Saludos,