Historia de la UNESCO
A raíz del estallido de dos guerras mundiales en menos de treinta años, la UNESCO se fundó con una visión clara: lograr una paz duradera, habida cuenta de que los acuerdos económicos y políticos entre los Estados eran insuficientes para conseguirla. Era menester unir a los pueblos del mundo y fortalecer la solidaridad intelectual y moral de la humanidad mediante la mutua comprensión y el diálogo entre las distintas culturas.
Para conseguir este objetivo, la UNESCO ha impulsado toda una serie de programas precursores a lo largo de toda su historia.
La UNESCO ha movilizado a filósofos, científicos, artistas e intelectuales de todas las naciones para denunciar y combatir las teorías racistas y llevar a cabo proyectos innovadores que han transformado nuestro mundo, por ejemplo:
- La Convención Universal sobre Derecho de Autor (1952)
- El Programa sobre el Hombre y la Biosfera (1971)
- La Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural (1972)
- La Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial (2003)
La UNESCO ha dado lugar a la creación de varias instituciones internacionales de investigación científica, como el CERN (1952) y el centro SESAME (2017), así como a la puesta en marcha de un sistema mundial de alerta contra los tsunamis. También ha agrupado a especialistas e investigadores para publicar la historia de los cinco continentes y la primera Historia General de África.
Las campañas de alfabetización llevadas a cabo por la Organización han permitido impulsar el desarrollo de varias naciones, como Italia, la República de Corea y Afganistán.
La UNESCO no sólo ha establecido principios universales sobre la ética de la ciencia y el genoma en defensa de los derechos humanos, sino que se ha dedicado a proteger las realizaciones más admirables de la humanidad salvando del anegamiento los templos del antiguo Egipto, preservando los tesoros culturales de Venecia o de Angkor y reconstruyendo el Puente Viejo de Mostar hundido por la guerra, etc.
La UNESCO en cifras
se benefician del Centro de Asesoramiento sobre Tsunamis en el Mar de China Meridional.
Ante los retos que afronta el mundo contemporáneo, el mandato y la misión de la UNESCO son más pertinentes que nunca. Con el apoyo de todos sus Estados Miembros, la Organización sigue mostrando el camino a seguir:
- replanteándose los futuros de la educación para captar el nuevo mundo actual y lograr que todos convivamos juntos en paz y en armonía con el planeta;
- estableciendo normas comunes sobre la ciencia abierta y la ética de la inteligencia artificial; y
- elaborando instrumentos innovadores para luchar contra las nuevas modalidades de racismo, los discursos de odio y la desinformación.
En Beirut y Mosul, la UNESCO está también presente sobre el terreno para hacer revivir el espíritu de estas ciudades devastadas y de sus atribuladas poblaciones.
Después de más de 75 años de existencia, la misión de la Organización es más importante que nunca: el mundo necesita educación, ciencia, cultura y comunicación e información. Necesita humanidad, en suma.