Casi humanos... de momento
Hoy es viernes y seguramente Freud estará pensando en cómo se puede explicar el futuro mirando al pasado y en cómo las neuropsicosis de defensa pueden explicar la resistencia al cambio en las organizaciones.
Aunque parezca que el asunto hoy va de psicoanálisis, no te dejes engañar. Tampoco hoy es el día. Hoy va de cómo la cuarta revolución industrial lo cambiará todo y no nos podremos resistir al cambio.
Pues es que estaba el miércoles viendo la tele y de pronto vi cómo se hacían realidad todas las películas futuristas sobre exterminación de la raza humana. Presentaban en El Hormiguero a la robot humanoide Sophia. En ese momento me vino a la mente la serie Humans, que explora el impacto social y emocional que causa la relación entre humanos y robots en el seno de la cuarta revolución industrial. Por resumir, la historia transcurre en un futuro cercano en que los dispositivos más modernos que las familias pueden poseer son unos robots/sirvientes muy "guapines", dotados de inteligencia artificial y de apariencia similar a humanos, pero sin conciencia de sí mismos ni sentimientos. Esto, provoca trastornos sociales al reemplazar de forma más efectiva y económica a los seres humanos, pero también porque aparecen unos pocos, que poseen conciencia y sentimientos, algo que se creía imposible pero que sucede y genera algo parecido a “la de San Quintín” pero en versión moderna.
Si no te interesan estos temas, deja de leer aquí, no pierdas más tiempo. Si te genera curiosidad, te sigo contando. La cuarta revolución industrial se caracteriza por una gama de nuevas tecnologías que fusionan los mundos físico, digital y biológico, impactando en todas las disciplinas, economías e industrias y desafiando ideas sobre lo que significa ser humano.
Vamos a lo mollar. Con este futuro cercano, el fenómeno de resistencia al cambio parece obsoleto en sí mismo. Algunas empresas no se deciden a hacer cambios hasta que notan malos resultados, una gran pérdida de clientes, de ingresos o cuando notan que algo va realmente mal. Sin embargo, lo que deberían hacer es adaptarse antes a los cambios para que esta situación no se llegue a producir.
La adaptación a acontecimientos externos o internos puede dar lugar a reticencias y tensiones. Puede dar lugar a objeciones por parte de las personas que se tienen que someter a estos cambios, les cuesta y pueden negarse a colaborar. ¿Qué se puede hacer ante esta situación? Como siempre he escrito y defendido: mantener una buena comunicación interna en la empresa que haga entender a los empleados las razones y mejoras que suponen los cambios y sobretodo, ofrecer a los trabajadores una buena posibilidad de formación y capacitación que les permita adaptarse a los cambios con facilidad. Con la que se nos avecina, toda organización que no vire hacia este enfoque, comunicación y formación en nuevas tecnologías (sé que no descubro la pólvora), estará abocada al fracaso. Por eso digo que resistencia al cambio es igual a muerte laboral, así, sin paños calientes.
Pero permitidme que vuelva a Sophia porque me “flipa”. Algunos datos: fue diseñada en 2016 para aprender y adaptarse al comportamiento humano, el objetivo es aplicar los avances en inteligencia artificial permitiendo desarrollar tecnologías que mejoren la interacción entre humanos y robots. En octubre 2017, se convirtió en una ciudadana saudí y actualmente es el primer robot con nacionalidad. Ha sido entrevistada en diversas ocasiones como un ser humano. Aprende a medida que interactúas con ella y, algo inquietante, aunque no tiene emociones (de momento) ya es capaz de improvisar respuestas.
Con estos mimbres que estamos manejando, está más que claro que los robot harán muchos de los trabajos que hoy día hacemos los humanos y además, lo harán mejor que nosotros (de momento todas aquellas tareas que sean repetitivas, que son muchas). Desde mi punto de vista, esta cuarta revolución no hará más que polarizar a la población creando muchísimos nuevos puestos de trabajo, pero dejando pocas opciones a las personas que no estén formadas y en continuo aprendizaje. Por lo tanto, la resistencia al cambio en un mundo laboral en el que estamos en plena vorágine de cambio es absurda por definición y, como mínimo… tremendamente triste.
Founder & CEO People as a Service [PaaS] | Head of talent Hanbai | People Zienideas | Talent & Culture Viaja de Verdad | Profesora Startups Institute | Mentora
5 añosLa gente no me creía cuando decía que Black Mirror es una serie visionaria a la par que inquietante pero.....preparémonos!