El momento más incómodo de la entrevista laboral: la pregunta sobre las debilidades

La peor respuesta que se puede dar a esta pregunta es, curiosamente, la más nombrada por los candidatos, desde estudiantes a profesionales de gran trayectoria, desde operarios a gerentes. Para salir del paso, pronuncian la respuesta más temida por los reclutadores de todas las áreas: soy demasiado perfeccionista.

Admítelo, tú también la dijiste. Como eres observador, te diste cuenta de que el entrevistador que tenías enfrente fruncía el entrecejo y, de pronto, la respuesta que tan alegremente pronunciaste ya no te resulta tan convincente. Sabes que metiste la pata y que tienes que buscar una mejor.

Entonces, te pones a buscar en Google y le preguntas a los chats de inteligencia artificial qué es lo que queda bien responder, pero nada te convence. ¿Será que alguna de estas respuestas aplica a mi caso?, te preguntas. ¿Y si justo elijo la respuesta que no me conviene? ¿Y si miento y se dan cuenta? Gran incertidumbre.

Para responder estratégicamente y con confianza, es necesario saber...

¿Por qué se pregunta sobre las debilidades en la entrevista laboral?

La respuesta es simple: para conocerte mejor. En la entrevista laboral se está evaluando tu nivel de ajuste con el puesto. Se tiene mucho cuidado de evitar contratar candidatos no aptos porque pueden generar importantes pérdidas a la empresa (sí, el costo de una mala contratación es elevado).

Ahora bien, tú puedes mentir, cosa que no te aconsejo. Ten en cuenta que un reclutador avezado utilizará esta y otras versiones camufladas de la misma pregunta para averiguarlo. Más allá de que te descubran, mentir está mal y lo único que te lleva lejos es la verdad.

Por lo tanto, no te queda otra que dedicar un poco de energía a conocerte a ti mismo, lo que te permitirá formular una respuesta honesta a la temida pregunta de las debilidades. Pero hay otra razón por la que se hace esta pregunta…

Peligro a la vista

Te he dicho más arriba cuál era la peor respuesta (que eres perfeccionista), pero no te dije toda la verdad; hay una respuesta que es realmente fatal, nefasta, desafortunada: aún peor que decir que eres perfeccionista es decir que no tienes debilidades.

Un candidato que no puede admitirlas es una luz roja para una empresa. Da lugar a pensar que es arrogante, falto de auotocrítica y, por lo tanto, alguien que se resistirá a ser instruido, guiado, entrenado (cualidades necesarias hoy).

Por lo tanto, es buena idea que te prepares para dar una debilidad principal y dos secundarias por si el entrevistador es incisivo. Hay algunos que piden más, y también debes prepararte para el escenario, así que ten tres de reserva.

Pero a no estresarte demasiado con este asunto: todos tenemos debilidades. Las debilidades no son defectos, son características que te hacen único, de la misma manera que las fortalezas. En vez de ocultarlas, demuestra cómo las gestionas.

Tómate la pregunta como una oportunidad para demostrar tu honestidad, capacidad de autocrítica, ganas de mejorar y resiliencia. No te voy a dar respuestas prompteadas, no las necesitas. Pero antes, debes entender...

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El próximo miércoles, en la segunda parte de este artículo, te daré las claves para responder sobre las debilidades en la entrevista laboral. Puedes esperar a la próxima entrega o leer el artículo completo en nas.io/carrera