Los 6 Pilares del Liderazgo

Confieso que siempre me causó gracia leer los títulos de aquellos artículos o incluso libros que se refieren a algún tema apelando a la cuantificación en sus distintas variantes: Las 4 Patas del Cambio, Los 3 Peldaños hacia el Éxito, Las 7 Claves para Delegar, etc., como si existiera una suerte de garantía de que siguiendo esa "receta" se va a lograr lo que el autor promete.

Sin embargo, con el correr del tiempo me fui enfocando en trabajar sobre los distintos aspectos relacionados con la capacidad de influir en las personas, coordinar de manera efectiva el trabajo de los equipos y asegurar el cumplimiento de los objetivos formulados generando ámbitos de bienestar, y entendí que era necesario compactar los conceptos de un modo mas simple y mas recordable para la audiencia. Y fue entonces que me sorprendí a mi mismo en cursos, talleres y charlas hablándole a la gente de Los 6 Pilares del Liderazgo.

¿Se trata de una fórmula mágica que garantiza al que lea estas líneas que se convertirá en un líder de clase mundial? Por supuesto que no. Solamente pretende ser un modo simple de recordar algunos valores centrales que he obervado en mi experiencia trabajando con líderes exitosos. Pido disculpas a los autores que usan el recurso de la cuantificación por haberlos malinterpretado, y paso a exponer mis 6 Pilares:

Confianza: siempre me gusta decir que la confianza es algo así como "el pegamento emocional de los equipos". ¿Se pueden obtener resultados sin confianza? Por supuesto que sí, pero de un modo mucho más costoso en términos materiales, emocionales y culturales. Uno de los focos principales que debe tener cualquier líder en contextos como el actual es generar entornos de trabajo en donde reine la confianza en todos sus niveles: del líder en sí mismo, del líder en su equipo, del equipo en su líder, del equipo en la organización y de la organización en sus líderes/equipos.

Responsabilidad: entendiéndola como respons-abilidad (o habilidad de responder), creo que es una competencia central que deben transmitir los líderes en su día a día, ya que son ellos quienes "responden" ante la organización por el resultado del trabajo de sus equipos, así como lo hacen ante sus equipos por los compromisos que la organización haya asumido con ellos. La capacidad de hacerse cargo, el "yo respondo por" tiene especial relevancia en ambientes desafiantes como el que nos toca vivir actualmente.

Compromiso: si consideramos el compromiso como la capacidad de cumplir y hacer cumplir promesas, sin duda resulta indispensable este atributo para que finalizado el ejercicio, los líderes puedan hacer realidad lo prometido a la organización al definir los objetivos. El desafío consiste en lograr que los integrantes de los equipos puedan armonizar sus propios compromisos e intereses personales con los compromisos e intereses inherentes a la compañía.

Respeto: normalmente se relaciona esta palabra con la idea de buen trato o buenos modales, lo cual desde mi punto de vista es su aspecto mas básico ya que difícilmente podremos coordinar acciones de modo efectivo en un ámbito de maltrato. Encuentro mucho mas significativa la noción de respeto en referencia a la aceptación y consideración de la diversidad de miradas, opiniones o intereses que puede haber dentro de un equipo en torno a un determinado tema. La diversidad siempre implica una mayor posibilidad de conflicto, pero también una mayor oportunidad de innovación y creatividad.

Flexibilidad: si bien estamos bastante entrenados en esto de adaptarnos y reinventarnos de acuerdo a los vaivenes socioeconómicos producto de las distintas crisis que se viven a nivel global, creo que siempre debemos prestar atención a desafiar paradigmas y creencias que nos dejen aferrados a situaciones que no se ajusten a lo que dicte la realidad imperante. Parafraseando a Darwin, creo que las organizaciones que sobreviven no son necesariamente las mas grandes ni las mas fuertes sino aquellas que mejor se adaptan al medioambiente que las rodea.

Entusiasmo: ¿cómo hacer para generar entusiasmo en los equipos viviendo en entornos de crisis, incertidumbre y cambio permanente? Como siempre digo, yo no tengo respuestas sino propuestas, y en este caso en particular lo que propongo es enfocarse en la Misión de la compañía, es decir aquello que la distingue por su contribución al mercado y a la sociedad en términos de productos o servicios. Está absolutamente comprobado que las personas se entusiasman en su trabajo cuando comprenden claramente para qué hacen lo que hacen, ya que eso les da un sentido de propósito que trasciende lo meramente remunerativo. En contextos como el que vivimos actualmente, esto resultará clave para combatir el desaliento, la frustración y la desidia que a veces puede provocarnos la realidad circundante.