Celebrando el Mes del Orgullo: Un paso más en la creación de un lugar de trabajo inclusivo.
Junio es el mes en el que personas, organizaciones y empresas de todo el mundo aprovechan la oportunidad para celebrar la inclusión y la diversidad de las personas LGBTQ+, compañeros y amigos. Es el momento de reconocer los avances que se han hecho para proteger los derechos humanos básicos de los miembros de esta minoría y celebrar sus contribuciones a la sociedad en su conjunto. Esto incluye también los logros que han conseguido en su vida profesional y como miembros de sus equipos.
Al pensar en lo que este texto significaría para mis compañeros y amigos LGBTQ+, tuve que reflexionar profundamente sobre si podía decir algo significativo que quizás ellos no hubieran escuchado antes, o si podría hacerlo de una manera que no fuera complaciente. Al pasar por este proceso, decidí resaltar 3 elementos básicos o cuestiones que afectan a los miembros de esta comunidad: cosas en las que a menudo tienen que pensar y lidiar a diario. Así que a continuación, he tratado de describir esos elementos lo mejor que he podido, con un espíritu de apoyo y divulgación.
1) Eres visible y te ven.
Creo que este mensaje es fundamental para la comunidad LGBTQ+ y para cualquier minoría en general en un entorno laboral. Para nuestros compañeros y amigos LGBTQ+, esto tiene un significado especial sobre todo desde la perspectiva de haber salido del armario. Es decir, no siempre es fácil determinar si un empleador tiene una política receptiva cuando se trata de compartir este aspecto de lo que uno es como persona. Hoy en día, la mayoría de las empresas tienen políticas que abordan cuestiones de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI). La política y las directrices son una cuestión, mientras que su aplicación en el día a día de la empresa es algo totalmente distinto. Actos sencillos como las conversaciones habituales sobre qué hiciste el fin de semana o a quién llevarás a la fiesta de fin de año de la oficina, pueden ser a veces un camino difícil de recorrer. Por eso es importante que las empresas y sus equipos de RRHH apoyen políticas, que den pequeños pasos incluyendo detalles inclusivos como invitar tanto a parejas como a cónyuges, o crear entornos inclusivos en los que los empleados LGBTQ+ se sientan igual de cómodos hablando de sus parejas, cónyuges y familias que cualquier otro miembro del equipo. Este paso puede parecer trivial, pero para los miembros de la comunidad LGBTQ+ es estupendo no tener que darle demasiadas vueltas a estas cuestiones.
2) Tus contribuciones son valoradas e importantes.
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Además de ser vistos y sentirse cómodos en el lugar de trabajo, nuestros compañeros LBGTQ+ también tienen sus propias aspiraciones profesionales y quieren contribuir a la empresa de forma positiva y significativa. No obstante, es importante señalar que igualmente desean un reconocimiento basado en el mérito y en la obtención de resultados tangibles. El reconocimiento del impacto de sus contribuciones debe basarse en resultados específicos que ayuden a la empresa a alcanzar sus objetivos empresariales generales. Esto puede abarcar cuestiones que van desde textos e imágenes inclusivos o no ofensivos en los materiales de marketing, la apertura de redes a nuevos grupos demográficos de ventas o canales de negocio, o ayudando a ampliar el alcance de las actividades de RSE para que incluyan a grupos ignorados o en situación de riesgo: tanto dentro de la comunidad LBGTQ+ como de otros grupos en general. En pocas palabras: la compasión provoca más compasión.
3) Tu voz será escuchada. Deja que tus aliados te ayuden a encontrarla.
En este punto, vuelvo parcialmente al anterior punto 1. Una cosa es ser visible y aceptado y otra sentirse cómodo en un entorno laboral. Sin embargo, esta aceptación se amplifica cuando todos los empleados, incluidos nuestros amigos y compañeros LGBTQ+, tienen la posibilidad de compartir y expresar sus ideas y opiniones en un espacio seguro; donde su asiento en la mesa de toma de decisiones está respetado y garantizado. Este es también un momento en el que la solidaridad juega un papel fundamental. Si eres líder de equipo o directivo y sabes que un colega LGBTQ+ podría tener una experiencia útil para compartir, pero duda a la hora de hacerlo, busca la forma de darle un espacio donde se sienta cómodo para hablar y presentar sus ideas. Sé voluntario para hacer una presentación conjunta sobre el tema con esta persona. Del mismo modo, si ha hecho un buen trabajo que merezca reconocimiento (véase el punto 2 anterior), tómate tu tiempo para destacarlo en una reunión semanal del equipo o en una publicación en las redes sociales. De nuevo, se trata de pequeños pasos, pero a la larga son los pequeños pasos los que consiguen un gran cambio.
El Mes del Orgullo es un momento especial para nuestros amigos y compañeros de equipo LGBTQ+. No todo el mundo lo celebra de forma visual (aunque no hay nada malo en ello), pero reconocer y compartir los momentos de orgullo con los empleados LGBTQ+ puede hacer maravillas para garantizar que el talento de alto nivel que estos empleados representan y el trabajo de calidad que realizan, permanezcan en la empresa: principalmente, porque hemos creado un espacio en el que se les ve, valora y escucha.